El Masaje a las Tres Diosas.
Fecha: 27/04/2020,
Categorías:
Hardcore,
Sexo en Grupo
Primera Vez
Autor: AkuSokuZan, Fuente: xHamster
... en blanco, ella solo nos soportaba por las comisiones que se llevaba.— Entonces para Jon queda la madurita, pero me da que no se va a quejar precisamente —bromeé con euforia, la castaña es la que más me había gustado de las tres, me parecía una luchadora insaciable, no me agradaban las sumisas.Gay me empujó con una mano mientras declaraba:—Él siempre se queja de todo, es un vago. Seguramente hasta le da pereza hacer las horas extras.—Ojalá le dé pereza, así me quedo con la morena y la castaña —supliqué montándome la fantasía de un trio.Tifani chocó sus palmas entre si para atraer nuestra atención.— Chicos, que os desmadráis. Vamos a resumir el plan. ¿Vale? Tenéis toda la tarde, toda la noche, podéis hacerlo esta noche o la de mañana, pero se van el lunes. Si os decidís finalmente por hacerlo, las marcáis y me lo hacéis saber; de esta forma llamare al teléfono de su habitación para informarlas de que han sido las ganadoras de un premio, el resto ya será cosa vuestra si aceptan. ¿Si? —preguntó.— No lo habría resumido mejor —aplaudí abriendo el portafolio observando la escasa información que había, lo típico: Fotocopias de los tres “Documentos Nacionales de identidad” y la factura pagada del hotel, junto con la tarjeta copia que abría la habitación en casos de emergencia, la agarré y la introduje en mi bolsillo, para posteriormente centrarme en los DNI’s —. Andrea la rubia; dieciocho años. María la madre morena de treinta y ocho años. Y su segunda hija Amanda de diecinueve años, ...
... la castaña —Me paré a revisar su foto con la mirada antes de cerrar portafolios y devolvérselo discretamente.—Bueno chicos, daros aire que vienen clientes. ¿No tenéis que ir a hacer masajes a hombres peludos o algo? Puerta —decía Tifani haciendo un gesto de despedida cargado de despreció con su mano, al tiempo que sonreía a los clientes mientras guardaba el portafolios de nuestras presas en su cajón correspondiente—. ¡Buenos días! ¿En qué puedo atenderle…?Gay y yo nos acercamos a Jon, el cual estaba inclinado en la barra del bar susurrándole al oído a la camarera.—Tenemos trabajo —Le informe agarrándole del cuello de su uniforme y tirando de él.— Te llamaré, preciosa —prometió Jon provocando en la camarera una sonrisa nerviosa.— Maldito mujeriego vago, tenemos trabajo con esas tres —repetí por si no me había escuchado la primera vez.— Oe oe, quieto parado —Jon opuso resistencia soltándose con facilidad girándose sobre mí mismo y colocándose bien la pajarita de su uniforme blanco—… Vaya palo. ¿Por qué no espiais vosotros mientras yo hago un masaje de prueba a la camarera…?— Haz lo que quieras —dije rindiéndome, llevándome la palma a la frente. Cuando Jon sentía pereza para algo, insistir era una lucha constante y yo no estaba dispuesto a estar encima de él todo el rato—. De todas formas tiene que haber uno de los tres en los masajes, si el supervisor pregunta por Gay y yo dile lo de siempre.— ¿Qué es lo de siempre? —Me preguntó sacándome de mis casillas.— Que estamos haciendo ...