Laurita mi mujer.
Fecha: 29/04/2020,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
Me llamo Cesar, soy colombiano, tengo 45 años. A la edad de 27 años me fui a vivir con mi mujer y madre de mis dos hijos, pero con el paso de los años todo cambia y después 18 años de matrimonio decidimos separarnos, por lo que no me quedó de otra que regresar al pueblo donde viven mis padres. Actualmente llevo 7 meses viviendo con ellos, yo soy topógrafo y tengo mi trabajo estable pero no es todos los días, por lo general en las tardes estoy en casa. Lo que les voy a contar ha cambiado mi vida demasiado. Recién llegué donde mis padres para el mes de noviembre de 2016 conocí a Laura, una niña de 13 años que se la pasaba metida hablando con mi madre, ( mis padres ya tienen edad avanzada superan los 65 años) está niña le ayudaba a mi madre con los mandados muy amenudo y cree que para todos era normal verla entrar a la casa, yo por mi parte fui entrando en confianza con ella, supe su edad, que vive con su abuela porque sus padres están en la capital trabajando, que está en el colegio, que su abuela es costurera y cosas así por el estilo. A comienzos de este año y ya para el año escolar, mi madre se fue para donde mi hermana que vive en Villavicencio puesto que había dado a luz a su primer hijo y ella quiso irse a pasar una temporada allá, mi padre suele salir desde muy temprano pues tiene un negocio donde se entretiene vendiendo artesanías, así que por lo general entre el mes de febrero y marzo quedé solo en las tardes en casa. Esto no pareció molestar a Laura y sin embargo ...
... iba a la casa o se pasaba del patio de su casa a la nuestra, así era su costumbre. Un día como cualquiera me preguntó si yo sabía algo de matemáticas que ella en el colegio ya estaba viendo álgebra y no podía entender nada de lo que le enseñaban, así que decidí ayudarle, llegaba a casa a las 2 de la tarde y yo comenzaba a enseñarle no solamente matemáticas sino con las otras asignaturas, a medida que corrían los días yo le preguntaba si tenía novio, si le gustaba algún muchacho, comencé a verla con otros ojos, tal vez la soledad en que nos encontrábamos en casa o mi falta de sexo, pero durante una semana me interese en eso, hasta le daba la plata de la merienda porque me decía que su abuela le daba muy poco. Así con los días comencé a tocarle las piernas a ella por debajo de la mesa donde nos sentamos a estudiar, ella no decía nada, solo seguía en lo suyo, y seguía tocando hasta que metía mi mano entre su pantalón y su ropa interior y tocaba los primeros días con dificultad su cuca, podía sentirla con vellos, y como se humedecia al rozarla. No decíamos una sola palabra de esto, ya hacía dos semanas que venía pasando y yo deseaba más, lo mejor de todo es que a ella debía gustarle, porque no se alejó de la casa y era puntual todos los días. Así que una tarde decidí que iba por más, simplemente nos sentamos a estudiar y al rato le dije que me gustaba mucho y me le acerqué y la besé y ella simplemente cerró sus ojos y se dejó, sabía que le gustaba y tal vez quería más pero le daba ...