1. Laura1985: De azafata de congresos en Barcelona


    Fecha: 30/04/2020, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    En aquel entonces acababa de cumplir 19 años,ya había disfrutado del sexo en innumerables ocasiones, mi misteriosa mirada, acompañada de mi perfecto cuerpo, bien definido, y mis pechos realmente bonitos, hicieron que no tardara en conseguir aquel trabajo de azafata de congresos que me iba a venir genial, ya que hacia tiempo que no conseguía generar ingresos y mi hermana empezaba a estar cansada de mantenerme, aunque a mi cuñadito no le importaba en absoluto, el hecho fue, que conseguí aquel trabajo, empezaba el sábado por la mañana en un stand donde debía mostrar a la gente una nueva crema anti arrugas de una importante marca del país,una compañera y yo debíamos estar allí, para que alguien de la marca nos explicase el producto y así fue, Andres un chico de unos 28 años, alto, esbelto, de precioso rostro, Inmaculada sonrisa y seductora mirada iba a ser el encargado de ello, al verlo realmente senti un extraño nerviosismo inusual en mi, que bueno estaba por dios, aunque con aquel imponente y elegante porte de traje y corbata desprendía una seriedad que lo hacia como inalcanzable, a pesar de mi gran éxito con los hombres, aquella seriedad me cortaba por completo.
    
    en mi compañera Ana pude comprobar que le producía la misma sensación debido a la cara de fascinación al verlo, nos explico todo y se marcho con sus compañeros, Pau y Enric, a una especie de mesa de reuniones, a pesar de la elegancia de sus trajes y lo guapos que estaban, contrastaba con el uniforme que a nosotras ...
    ... dos nos habían preparado, evidentemente éramos el reclamo para aquella crema antiarrugas línea para hombres, nuestras faldas con dificultad cubrían nuestras nalgas, apreciando justo en el limite parte de ellas y nuestras camisetas marcaban a la perfección nuestros preciosos pechos, los de Ana me superaban en tamaño, pero aun así eran realmente fascinantes, nuestro abdomen descubierto y dos coletas que nos hacían parecer dos colegialas sobre unos enormes tacones, durante todo el día pudimos notar las miradas furtivas de los hombres que.por allí pasaban, así como el de las mujeres, a pesar de que al principio nos sentimos incomodas, debo reconocer que a medida que paso el día, me senti mucho mas comoda incluso me divertia calentando aquel personal que me devoraba con la mirada,transcurria la mañana y tanto Ana como yo estábamos alucinadas de la cantidad de ventas que estábamos realizando y sumando en nuestro pensamiento el beneficio que íbamos a poder conseguir en aquellos tres días de feria, aquel contraste de seriedad y elegancia, con nuestra lasciva uniformidad y nuestros exhuberantes cuerpos hacia que prácticamente aquella crema se vendieran solas, las miradas que recibía de aquel sector masculino a mi escote que prácticamente me desnudaba con la mirada, hacia que a la vez de la ilusión por la comision que Tanta falta me hacia, me excitaba de sentirme tan deseada y por tantos hombres en tan poco tiempo, aquel trabajo me estaba gustando y aquellos tres guapos hombres trajados ...
«1234...7»