Mis incios...
Fecha: 28/09/2017,
Categorías:
Transexuales
Autor: su19sev, Fuente: xHamster
... hermano y no tengo muchas oportunidades de estar solo.- ¿Y en los baños del instituto? Yo me pajeaba un montón de veces allí, y con compañeros también, viendo revistas porno.- Nooo, en el insistí, no, ¿y si me pillan? Yo también he visto revistas porno con mis compañeros, pero lo de la peli es la primera vez que lo veo.- ¿No lo habías visto nunca? Pues lo mejor, a mi es lo que más me gusta, es lo que más placer da, al que da por culo y al que recibe.Para hablar conmigo giraba su cuerpo hacia mí quedando la punta de su polla a escasos centímetro de mi muslo, y seguía pajeándose arriba y abajo, con ritmo pero no muy deprisa, el movimiento de su mano sobre su polla me estaba hipnotizando, como el péndulo de un reloj, cada vez que su mano subía o bajaba su polla parecía interminable hasta que llegaba la otro extremo. Y él disfrutaba viendo mi cara de bobo que se me estaba poniendo al ver su polla siendo pajeada por su mano.- ¿Sabes lo que yo hacía con mis compañeros?- …eh?... no… - parecía como si al hablar perdiera concentración en mi visión y algo dentro de mí no quería que eso pasara - ¿qué hacías?- Nos pajeábamos unos a otros, es una gozada sentir otra mano que no es la tuya sobre tu polla. ¡Venga!, vamos a hacerlo - y sin darme tiempo agarró mi polla con su manaza, y empezó a meneármela.Vaya comparación, su mano tardaba un rato en llegar de un extremo a otro de su tremendo rabo y sin embargo todo mi polla le cabía en la mano. Con esa mano podría haber agarrado dos o incluso ...
... tres pollas del grosor de la mía y en la suya la punta de sus dedos llegaban justo para tocarse. Cogió mi mano y se la lleva a su polla, uffff que sensación! Todo mi cuerpo empezó a temblar y tuve varios espasmos musculares en el abdomen y en los muslos. La tenía tan dura como una estaca, y la piel emanaba un calor tremendo. Con su mano sobre la mía, que la cubría en su totalidad, se empezó a masturbar, mmmm aquello era… no se como describirlo, los que hayan tenido una buena polla gorda entre sus manos sabrán lo que es. Podía notar todos sus músculos internos hinchados de tanta sangre.Creo que hay mi cerebro y mi voluntad se desactivaron, porque en un momento él ya no tenia mi polla en su mano, pero yo tenia mis dos manos en la suya y aún así solo lograba cubrir un poco mas de la mitad de ese primer cipote que tocaban mis inocentes manos. Para eso yo me había recostado en el sofá y cabeza ya no miraba la tele, solo como mis manos subían y bajan por aquel tronco de carne. Él aprovecho para pasear su mano por mi espalda y llegar a mis nalgas para amasarlas, apretarlas, darles palmaditas, azotes y sobarlas bien.No recuerdo como fue, si él puso su mano en mi nuca y empujó o yo voluntariamente al ver que no podía pajear todo su rabo con mis dos manos, me metí la cabeza, gorda, brillante y roja como un fresón maduro en mi boca. Él con su mano abarcaba por turnos mis nalgas, con toda su mano me agarraba una nalga, la sobaba, la apretaba con fuerza y la meneaba de tal forma que todo ...