VOLVI A PROBAR LA RICA LECHE DE MAMA
Fecha: 03/05/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... que me producirían me ponía mal moralmente. Por eso no sabía como lidiar de nuevo con aquella situación. Una noche que estábamos solos me llamo a su habitación y me pidió que le tomara una foto. Era su octavo mes, y tenia un slip y una camisa bastante holgada. Se recogio la camisa a la altura del pecho, pero al no sentirse comoda por lo ancha me pregunto que si se la quitaba mejor. Le dije que como mejor se sintiera comoda. -Es que me da tantica vergüenza que me veas corta de prendas, pero que hacemos –dijo. -no te avergüences que estamos entre amigos, ¿o no? Ella asintió y se deshizo de la camisa y quedo con su brassier, y no pude evitar verle sus pezones que se transparentaban a través de la tela, marrones e inmensos como discos, y no pude evitar que mi pene lanceteara ante exquisita visión. Casi que no pude tomarle la bendita foto de lo tembloroso que estaba. Esa noche la figura de mama venia a mi cabeza, e hice de tripas corazón para no darle alas de otra manera. Asi que mi tensión sexual crecia, y solo la desfogaba mirando videos de mujeres amamantando para hacerme unas buenas masturbaciones. Mi mayor fantasia sexual era tener sexo con una mujer lactante, y me lamentaba que un hombre como papa tuviera al alcance mi fantasia, y la hubiera echado a pique por su infidelidad. Me daba rabia que alguien como yo no tuviera mejor suerte. Cuando ya se acercaba la hora del parto, mi padre le pidió un tregua para acompañarle, de modo que estuvo un fin de semana en casa, desde el ...
... vienes, pero llego el martes y viajo porque mama no daba señales de nada. La cosa es que el miércoles mi mama me llamo a la universidad alertándome que estaba en camino al hospital, donde nacio satisfactoriamente a las pocas hora una hermosa bebita de manera natural. Y a partir de ahí comencé con mi tortura de tener en casa a una mujer que reúne las características de la musa de mi fantasia, aunque fuera mi madre. Por tanto me desligue de ella un tanto para no sufrir ni sentirme mal con su seductora figura. Cada vez que veía que iba a amamantar, salía de allí para evitarme malos pensamientos y mi corazón agitado. El caso es que mi comportamiento fue notorio, y pronto mi mama me pregunto por la razón del mismo. Le dije que eran ideas suyas porque nada estaba pasando. -Te equivocas, porque estas últimamente huidizo conmigo y con tu hermanita, asi que dime que te pasa. -Nada, mama. Nada que importe. Ella no le dio largas al asunto y la cosa paro ahí. Pero cuando ya cumplia mi hermanita sus primeros 4 mesesitos, una mañana, al llegar de la universidad, encontré a mi madre haciendo el almuerzo. Solo estaba ella y la nena. Yo fui a mi habitación y al rato me llamo a la sala para que le contara sobre un asunto que me había mandado averiguar. Nos sentamos y casi al instante la bebe se despertó, y mama fue por ella. -Mejor te cuento luego –le dije. -Y por que no ahora –dijo sentándose con la bebe en brazos-. ¿Acaso tienes algo urgente que hacer? Le dije que no, y ella me pidió que me ...