La sexy transexual de la piscina
Fecha: 28/09/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: zorro_en_celo, Fuente: CuentoRelatos
Llevaba dos días en el apartamento y desde el primer día de mi llegada, elegí darme un refrescante chapuzón en la piscina comunitaria que compartimos con la torre de enfrente.
Me percaté que había alguien tomado el sol en una butaca playera de aluminio, propiedad de la piscina y me aproximé a ella para saludarla.
—buenos días —dije yo.
—buenos días —dijo ella.
—¿tienes apartamento en alguna de las dos torres? —inquirí yo.
—si, en aquella de ahí atrás —exteriorizó ella señalando a mi torre.
—sí, yo también y en la misma torre que tu —afirmé yo.
—¿cuál es tu apartamento? ... si puedo saberlo ... —interrogué.
—sí, puedes saberlo, es el 81 —confesó ella.
—¡Guau, que cerca!, el mío es el 82, somos vecinos —observé animado. —ya que somos vecinos, me presentaré, me llamo Gonzalo —proclamé.
—yo soy Melany —dijo ella.
Melany tenía un escultural cuerpo cuidado en gimnasio y tenía una media melena rubia que le hacía más sexy y también unas tetas de tipo medio que me habían gustado y una perfecta golosa boca de mamona que era ideal para tragar y saborear masculinos y gordos rabos como el mío.
—¿qué tal si nos damos juntos un chapuzón? —pregunté.
—perfecto, querido Gonzalo, perfecto —comunicó Melany.
Melany usaba un sexy y libidinoso tanga de imitación piel de tigre que me estaba poniendo rijoso y cachondón y que me daban ganas de follarla allí mismo, pero me contuve.
Nos tiramos al agua y estuvimos dando largas nadadas en la piscina y hasta ...
... alguna pequeña carrera para ver como estábamos los dos de forma física.
—¡uff, vaya paliza que nos hemos dado!, ¿no te parece, Melany? —interrogué.
—sí, ha sido un buen "palizón" —afirmó Melany.
Yo no podía apartar mis lascivos y concupiscentes ojos de macho en celo, pues esa aparente hembra me había puesto más lujurioso y había aumentado mis ganas de darla rabo a base de bien.
—¿qué te parece si te invito a comer en mi apartamento? —tanteó Melany.
—Bueno. Bien, Vale —consolidé.
Secamos nuestros cuerpos y Melany cubrió sus tetas con el sujetador del tanga y eso la hacía aún más "follable" y aumentó más si cabe mis ya desproporcionadas ganas de follarla.
Nos dirigimos al apartamento y nos adentramos en los modernos ascensores que habían cambiado hacía dos años, pues los que antes había se quedaron viejos y obsoletos y ya solo daban problemas. Casi al cerrar las puertas, Melany, se me echó encima y me pegó un lascivo y depravado morreo con lengua, pues la muy puta se dio cuenta que yo estaba empalmado.
—me he dado cuenta que te gusto, Gonzalo —expuso Melany.
—¿cómo te has dado cuenta de eso? —investigué.
—Tonta no soy, estás empalmado, por mi culpa —aseguró Melany.
—sí, es cierto. Melany. Tienes un lascivo cuerpo muy "follable" —afiancé.
—No vas a querer saber lo que soy en realidad —examinó Melany.
—¿qué quieres decir, Melany? —interrogué.
—que soy una transexual —aseguró Melany.
Melany me enseño su rabo y me di cuenta realmente lo ...