1. Mi primera vez con una mujer de verdad


    Fecha: 29/09/2017, Categorías: Sexo en Grupo Autor: adasdasd, Fuente: CuentoRelatos

    ... que notabas cada curva de su cuerpo. Aquel día llevaba un vestido negro de tirantes que dejaba ver aquellos preciosos pechos, tenía una 110, para mi aquello era espectacular, y como era más baja que yo siempre disfrutando de las vistas.
    
    ―No pierdas detalle, me decía que esto no se ve todos los días.
    
    Aquellos roces con su pecho me ponían a 100, Carla se daba cuenta, tonta no era, y esas vueltecitas bailando que pegaban su trasero contra mí, hacían que mi excitación fuera mayor.
    
    ―¿Ya has sacado a pasear a tu amiguito?, entre risas haciendo ademán de mirar hacia abajo. Y luego no digas que la culpa es mía, que te conozco.
    
    ―Carla cielo, reconocerás que algo de culpa sí que tienes, que yo no salgo a la calle así habitualmente.
    
    ―Hay si mi marido se pusiera así de contento.
    
    ―Álvaro se preocupa más de tener la copa llena que de ti.
    
    ―Cualquier día de estos vamos a tener que aprovechar uno de sus viajes tú y yo, me dijo mientras su pierna rozaba contra mi pene.
    
    ―No hagas eso Carla, que me pongo muy malito.
    
    ―Que pasa que no te gusta….
    
    ―Me encanta, pero luego tú te vas con tu marido y yo a dos velas.
    
    ―El que algo quiere algo le cuesta….
    
    Se acabaron los bailes lentos y fuimos a por las copas, allí estaba Álvaro con su habitual borrachera.
    
    ―Cojamos las copas y salgamos al jardín?, te parece
    
    Esta discoteca contaba con un jardín exterior que era utilizable en verano
    
    ―Me parece bien.
    
    Salimos fuera, y buscamos un sitio tranquilo donde ...
    ... sentarnos. En un sitio un poco apartado, un banco de piedra, allí nos sentamos.
    
    ―El banco está muy frio, dijo mientras se sentaba encima de mí.
    
    Así que Carla con su culito encima de mi pene, yo mirándola mientras le ponía una mano en la cadera, intentando mantener una conversación y sin apartar la vista de sus pechos.
    
    ―Me parece a mí o me estas tocando el culo
    
    ―Que va Carla, tocarte el culo es esto, y acto seguido le puse una mano en su culito, acariciándolo. Intente besarla, pero no me dejo.
    
    ―Estás loco que aquí nos conoce todo el mundo.
    
    ―Carla cariño tengo el pene como una roca, no me dejes así, anda.
    
    Carla empezó a tocarme el pene por encima del pantalón
    
    ―Madre mía sí que esta empalmado.
    
    Me desabrocho el pantalón y apareció mi pene duro con las venas marcadas.
    
    ―Joder sí que estás bien dotado, vaya pollón que tenemos aquí.
    
    Empezó a masturbarme mientras metía mi mano debajo de su falda, tocado aquel culito durito y de piel muy suave. Estaba en estasis. Carla me la meneaba rápidamente mientras miraba a ver si alguien nos veía.
    
    Me daba igual si alguien nos veía, estaba muy excitado, yo buscaba su rajita y me encontré un volcán húmedo de placer custodiado por unas braguitas, estaban mojadas.
    
    Una de mis manos busco su pecho, cálido, blandito, no sin mucho trabajo, liberé uno de elos de la prisión de aquel sujetador, la visión de aquel pezón duro, tieso, hizo que me lanzara a por él y empezara a chuparlo.
    
    ―Estate quieto, decía con la voz ...