La primera vez con mi perro. 2 - Relatos Eróticos

La primera vez con mi perro. 2

No me gusta engañar a los lectores por lo que, nada es verdad, nada es mentira, todo depende del cristal con que se mira, cada lector puede decidir cuáles son las partes ciertas y las de la imaginación, espero les guste. Para mi suerte llegaron las vacaciones por lo que tendría más tiempo para andar de caliente y jugar con el perro, mi mama quería meterme a un curso de verano como otros años pero la convencí de que me dejara en casa para descasar. Espere el martes que no venia la señora a hacer limpieza y tendría todo el día para disfrutarlo, cuando mi mama se iba al trabajo fue a mi cuarto a despedirse y darme sus recomendaciones para que me cuidara al estar solo, apenas escuche que se fue me quite la trusa, la pija ya estaba parada de lo excitado que andaba, me quede acostando mirando televisión hasta que me dio hambre y baje desnudo a prepararme algo para desayunar, regrese a mi cuarto a ver televisión me acomode abriendo y subiendo las piernas para meterme dos dedos al ano, después de media hora ya estaba muy caliente, así que me pare baje y me atreví a salí denudo al patio delantero, el miedo de que algún vecino me mirara hacia que sintiera que mi corazón se salía de lo rápido que latía, pero no paraba de jalar la pija y con la otra mano meterme dedos al ano, al sentir el orgasmo me pare de frente al portón solté la pija y movía los dedos dentro del ano, mientras salieron disparados ocho buenos chorros de leche cayendo al piso, nunca me había salido tanta leche como esa ...

... vez, cuando termine y mi respiración se normalizo me metí a la casa. Me lave las manos y lave los trastes del desayuno antes de regresar a ver la televisión, después de esa abundante eyaculación la pija se bajo y colgaba junto con las bolas, recordé que se quedo mi leche en el piso del patio, así que salí cuidando que no me vieran a mirar si se había secado, el estar desnudo en el patio me excito otra vez poniéndose dura la pija, el portón de la casa era cerrado del piso a una altura de un meto y de ahí para arriba eran unos tubos con una separación de unos treinta centímetros por lo que de afuera podían mirarme, así que me pegue al portón donde si alguien pasaba solo me vería del ombligo para arriba, me empecé a hacer una paja y meter el dedo otra vez, mientras lo hacía pasaron algunos autos y algunas personas caminando sin darse cuenta que estaba desnudo y de lo que hacía, estaba muy caliente y pensé abrir la puerta y salir así parándome en la calle, pero no me atreví por el miedo, al sentir el orgasmo solté la pija y salió la leche, esta vez fue menos pero sentí igual de rico. Entre a recostarme en el sillón a ver televisión y me quede dormido hasta que sonó el teléfono, era mi mama diciendo que había pedido permiso en el trabajo y venia a casa con una pizza, al colgar subí corriendo a mi cuarto a extender mi cama y ponerme ropa. Al otro día llego la señora de la limpieza por lo que no podía hacer nada y la pija la traía muy parada de recordar las pajas que me hice en el ...