MIS 3 MUJERES III
Fecha: 28/05/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: freeman88, Fuente: SexoSinTabues
... aaaaaahhhhhhhh- Se empezó a venir, su fluido empezó a correr por mi mano y yo no desaproveche la situación. Saque mis dedos y metí toda mi boca en la entrada de su vagina bebiendo todo el manjar que su concha me daba. Su orgasmo termino ella se puso derecha y se dio la vuelta apoyo su espalda contra la pared y me vio arrodillado con la boca y la cara llena de sus fluidos sexuales. Me sonrió y me dio la mano para que me levantase. Me pare, la bese, poco le importo el sabor y olor de su propia concha, me cogió de la mano y me llevo fuera de la lavandería, caminamos por el departamento agarrados de la mano, desnudos los dos, no pensamos ni en mi esposa ni en Lucy mi sobrina, la lujuria nos cegó totalmente. Pensé que me llevaría a su habitación pero entro sin dudar al dormitorio principal, supongo que con un toque de venganza personal, si nosotros disfrutábamos de su intimidad era lógico que ella quisiera hacerlo en nuestra cama. Diana abrió rápidamente la puerta de par en par y me llevo de la mano hasta la cama donde me hizo sentar en el borde, con la misma mirada lujuriosa de la lavandería me dijo: - Ahora vas a ver que es bueno, cuñadito- Acto seguido se arrodillo y agarro mi verga con su mano, acerco su cabeza y empezó a meterlo en su boca, primero la cabeza y siguió bajando lentamente, la calidez de la boca de Diana me hizo estremecer de los pies a la cabeza, pensé que se detendría en su movimiento pero en una sola llego hasta la base de mi pene, su hermana también había ...
... logrado la hazaña pero nunca en la primera mamada, era obvio que Diana no se iba a reservar nada esta noche. Estuvo unos segundos con todo mi pene dentro de su boca y luego empezó a sacarlo, cuando al fin libero mi verga tomo aire como alguien que sale del agua, y me quedo viendo, con los ojos vidriosos, su boca tenia hilos de saliva que la conectaban con mi verga y sin decir una palabra empezó a masturbarme suavemente, se sentía riquísimo pues ya estaba lubricado por su propia saliva. Diana era una experta, me hubiera gustado saber cuantas verga tuvo que meterse a la boca para llegar a ese nivel, alternaba muy bien los tiempo entre meterse mi pene a la boca y las tremendas y firmes pajas que me daba, también lamia como toda una perrita mi pene desde la base hasta la punta y cuando bajaba de nuevo no tenia reparos en meterse mis huevos en la boca, yo sabia que si seguía en ese ritmo me correría sin remedio, así que la sujete del cabello y prácticamente la tire a la cama boca arriba, a ella pareció gustarle el trato rudo, con una actitud casi animal, me coloque encima de ella y le separe las piernas y doblando sus rodillas casi hasta sus hombros, tome mi verga y la apunte a la entrada de su vagina. La mire fijamente a los ojos y empecé a penetrarla, lentamente su concha se abrió dándome la bienvenida, el calor era impresionante y obviamente estaba mas que lubricada por la situación, note como ella controlaba la presión de mi pene al entrar, era toda una experta. Llegue el fondo ...