1. El novio de mi madre


    Fecha: 09/06/2020, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... cuerpo, haciendo que su verga entre y salga de mi cuca, que estaba empapada de lo caliente que estaba. «Mejor, dejame que te rompa yo la cola», me dijo levantando su cabeza y mamando mis tetas. «Pero despacio, no me hagas doler», le dije besando su boca y bajando de encima de él. Me hace poner en cuatro patas en el borde de la cama, siento que me abre las nalgas y su lengua empezó a pasar por mi ano. Me daban temblores, sintiendo como Emanuel me lambia el agujero de mi cola, como me besaba y mordia mis nalgas. Abre un cajón de la mesa de luz y saca un pote, empezando a lubricar mi ano, sentía eso frío y viscoso, como suavemente introducía un dedo y lo movía dentro de mi cola. Yo me empecé a acariciar la cuca mientras Emanuel apoyaba su verga contra mi ano, y di un fuerte y largo haaaaaaa, cuando da un empujón y siento como mi ano se rasga, se empieza a abrir a medida que empujón tras empujón que daba Emanuel, y yo gemia dando fuertes ayes de placer y dolor, su verga seguía entrando en mi cola, rompiendo mi ano. Yo seguía acariciando mi cuca, hasta que mis nalgas quedaron aplastadas contra la pelvis de Emanuel. «Mmmmmmm, mi ...
    ... enana hermosa, te acobo de romper esta hermosa colita», me dijo moviendo su verga dentro de mi cola. «Me gusta más por la cuca, disfruto más la verga por ahí que por la cola», le dije, dejando que me siga cogiendo la cola. Emanuel la sacó de mi cola, se limpió la verga, me hizo poner boca arriba abriendo bien las piernas, y me siguió cogiendo por la cuca, mientras sentía palpitar mi ano. «Haaaaaaaa, por acá disfruto más, me encanta sentir tú verga entrando y saliendo de mi cuca», le decía abriendo y levantando mis piernas lo mas que podía. Emanuel me comía a besos, la boca, las tetas, me mamaba fuerte los pezones, su verga parecía un pistón, entrando y saliendo de mi cuca, haciendo que grite de placer. Es increible como me vengo cogiendo con este hombre, me vuelve loca sentir como su verga me llena de leche, me retuerzo de placer en la cama, no quiero que saque su verga de dentro mío. «No me vas a dejar que te vuelva a coger la cola?», me dijo pasando su lengua por mis pezones, «bueno, corgeme por la cola no me gustó, pero me la puedes meter siempre que quieras», le dije, acomodandome entre sus brazos, besando su boca toda mimosa. 
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