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Viaje de pesca con mi primo VI
Fecha: 23/06/2020, Categorías: Gays Autor: Tinchoxxx, Fuente: SexoSinTabues
Aquellos días fantásticos de pesca y descubrimientos, se iban culminando, pero nuestros contactos sexuales se incrementaban día a día, a veces los dos solos y otras veces participaba Alejandro, ese era mi regalo para Sergio, porque aunque me provocaba celos verlos como cogian, me hacía feliz verlo a Sergio feliz. rarezas que tenía y tengo, pero bue. La charla que tuvieron nuestros padres con nosotros, fue enriquecedora, aunque como se darán cuenta, por nuestra edad no alcanzamos a comprender enseguida todo lo dicho, por mi parte y creo que a Sergio también le pasó los mismo, entendí algo así como que podíamos coger como y cuando quisiéramos, los años nos hicieron comprender mejor las cosas. Durante la madrugada se desató una tormenta, no muy fuerte pero si con mucha lluvia, así que temprano en la madrugada ya estábamos despiertos. Abrimos la carpa para recostarnos los tres boca abajo con las cabezas mirando hacia fuera, gracias a la galería de la carpa no nos mojábamos nada veíamos caer la lluvia con relámpagos a lo lejos, un paisaje que solo se puede apreciar plenamente donde no hay luz artificial. Así como estábamos, tenía a Sergio a mi derecha, así que estiré un poco mi brazo y lo posé sobre la espalda de el para acariciarlo. Fui bajando despacio, hasta tocar la parte alta de su cola, la que estaba desnuda como lo estaba antes de dormirnos. Lo acaricié suavemente, pasé mi dedo índice por su zanjita, acariciándole con la yema del dedo su agujerito, entonces el levantaba la ...
... cola un poco y abría los cachetes para que le metiera bien el dedo. Alejandro nos miraba recostado como estaba, apoyando su cara sobre sus manos. De pronto sentí su mano sobre la mía, acompañándome en las caricias y a la vez acariciaba mis dedos también. No se muy bien porque pero nos quedamos viendo mientras nos acariciábamos las manos y a la vez a Sergio, todo eso, la mirada, las caricias, los ojos de mi hermano clavados en mi, me encendieron mal. Alejandro lo captó y se fue subiendo sobre la espalda de Sergio hasta tener su verguita justo sobre la cola de el, sin quitarme jamás la mirada de mis ojos, como si estuviera pidiéndome permiso para subirse o desafiándome, no lo se, pero me encantaba. Cuando estuvo completamente encima, su cara quedó a no mas de 10 cmTs. De la mía, cerré los ojos y mis labios se fueron a buscar los de mi hermano. Literalmente, le comí la boca y me comía la mía, una delicia que no esperaba pero encantaba. Luego separé mis labios de los de el y seguí con las caricias mientras Alejandro lo cogia a Sergio. Sergio solo se dejaba hacer, entonces lo hice levantar la cola sin que alce la cabeza para que quedara casi en cuatro patas, acomodé a mi hermano detrás de el y guié su verguita a ese hoyito que era mío, con un poco de saliva la pijita de Alejandro entró completa para comenzar a bombearlo con ganas. Yo estaba en las nubes con ese espectáculo, ninguno decía ni una palabra, solo disfrutábamos el momento, el que duró varios minutos hasta que mi hermano ...