Juegos entre ellas me enredan(1)
Fecha: 30/06/2020,
Categorías:
Lesbianas
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Acabo de hacer 18 años, soy una chica normal y más bien tímida, y físicamente del montón. No es mi auténtico nombre, pero para aclararos diré que me llamo Ana.
Mi hermana Eva, es 2 años mayor. Siempre hemos tenido una confianza total y nos hemos contado todo, así que hace 5 años en una noche de verano me contó que había conocido una chica y que creía que se estaba enamorando de ella.
Un día me la presentó, era algo mayor (20 años), delgada, fibrada y con algunos tatuajes (luego resultó que tenía bastantes más), estaba claro que era lesbi por su forma de vestir y su ausencia total de maquillaje o pendientes (aunque era muy guapa). Sara era muy distinta a Eva, chica con curvas muy femenina.
Pese a su aspecto duro, resultó ser una chica simpática y maja, y me cayó bien en seguida.
Llegó el verano y un día Eva me dijo que Sara la había invitado a su apartamento de la playa, y que no sabía como decírselo a nuestros padres ya que no sabían nada de ella y mucho menos que salían juntas, sólo que eran amigas.
Así que habían pensado en que fuera con ellas y así no levantarían “sospechas”.
Al final me convenció, cuando un día me insistieron mucho las dos. Además que me encanta la playa y la verdad me divertía mucho con ellas.
Pues llegó el día, bueno, más bien la noche. El sitio era pequeñísimo, un estudio, con una cortina en donde tenía la cama, y todo lleno de cuadros raros pintados por Sara, y la verdad, bastante cutres.
El calor era terrible, y nada más ...
... llegar Sara se desnudó y corrió a la ducha seguida por Eva. Se oían sus risas y cuchicheos, y al poco salieron las dos desnudas y casi sin secarse.
Sara me dijo: anda y refréscate, si te molesta que esté desnuda puedo ponerme algo.
Yo le contesté que no, que no me molestaba, y me di una ducha, me sequé y me puse una camiseta larga.
Me llamaba la atención el cuerpo tatuado de Sara, brazo y hombro derechos y un tribal al final de la espalda. Era todo fibra, se le notaba una fanática del deporte.
Sara me dió a elegir, o dormíamos las 3 en la cama o yo en el sofá. Elegí sofá.
Se me hacía raro ver cómo Eva se metía en la cama con una tía y me sentía rara, como que sobraba, pero ellas intentaban que no fuera así colmándome de atenciones en todo momento.
El caso es que simplemente se acostaron y Sara comenzó a roncar. Al final, cansada por el viaje, acabé durmiendo.
A la mañana siguiente, me despertaron para ir a la playa. Me puse el bikini y al verme Sara me echó un piropo que me enrojeció, y provocó las risas de ellas y mía también.
Al llegar, Sara en bici y mi hermana y yo en el ciclomotor de Sara, nos dimos una buena caminata entre dunas, era muy temprano y entre las dunas acampamos, ponemos las toallas y ellas se desnudan.
Vamos, anímate, me dijo Eva, y riendo se acerca a mi, y las dos comienzan a hacerme cosquillas mientras me quitan el bikini. Yo entre risas me defiendo, pero me dejo y quedo desnuda como ellas.
¿Has visto qué hermana más bonita ...