Arrepentidos los quiere Dios. (Capítulo 57)
Fecha: 05/10/2017,
Categorías:
Grandes Series,
Autor: Febarsal, Fuente: CuentoRelatos
Capítulo 57
Para no levantar sospechas entre los empleados que presenciaban la escena, le dije al conserje de noche.
--Pablo; dele al señor una de las habitaciones de reserva, la mejor; es amigo de la casa; y que le suban el equipaje.
Entendió Ernesto mis precauciones, pero me dejó muy claro que me esperaría muy despierto en mi habitación. Y que tuviera mucho cuidado con lo que decía o hacía.
Sobre las tres de la madruga subí, allí estaba esperándome como dijo, despierto, y con una copa y fumando un cigarrillo.
--¡Qué! ¿Ya has despachado a todos?
--A ti es al que te tenía que despachar. ¡Cacho cabrón!
--No seas bordesocia, que ya verás lo bien que lo vamos a pasar.
--Cuánto dinero quieres por la cinta.
--La cinta ya la tienes, y gratis. Para que te regodees del concepto que tiene de ti el curita que te follabas.
--Sabes muy bien que me refiero a la original.
--Esa cinta es mi seguro de vida niña. Verás como yo si sabré sacarte los millones que mi hermanito y el "obis" no supieron. Y de momento vete bajando las bragas, que me tienes "el cirio, que se me derrite".
Sentía una terrible angustia. Tuve que soportar en mi vida a tíos cerdos en sus aberraciones sexuales; defecarme y orinarme encima de ellos, y darles por el culo con consoladores, pero esto no; me atragantaba.
Ahora, con dos niños a mi cargo, y con un futuro despejado para el resto de mis días: con un amor como el de Margarita, (el de Raúl era una incógnita) me sucedía esto. ...
... ¿Pero tan mala he sido para merecerlo?
Sólo sabía mi gran amigo Lopetegui la relación sentimental con Sergio, nadie más, por lo que a él acudiría en demanda de ayuda. Lo malo es que se había jubilado del Cuerpo de la Policía. Mañana le llamaría por teléfono a su nueva residencia de Gandía, y le contaría mi problema.
Tuve que hacer terribles esfuerzos para aguantar a este hijo de la gran puta encima de mí, toda la noche.
Su enorme falo, que otrora me parecía una obra divina de la Naturaleza para goce y disfrute de la mujer, ahora me quemaba en las entrañas.
Por la cabeza se me pasaban los más horribles pensamientos; hasta matarle, pero no me quedaba otro remedio que aguantar hasta encontrar una solución que no supusiera ningún escándalo ni riesgo.
--No te veo gozar, cacho zorra. Con "el curita" si que te lo montabas bien.. ¿eh? Y no pongas esa cara de mosquita muerta, porque más puta que tú no la ha habido en España.
La degradación y la humillación a la que estaba sometida rayaban en los límites del aguante humano; pero pensé en los hijos de Raúl a mi cargo, y por ellos soporté lo indecible.
--Bueno niña, ahora que "me has vaciado el depósito" vamos a hablar de negocios. Toma nota: lo primero que quiero que hagas... a ese tal José Antonio...
--¿A mi gerente?
--Lo que sea, pero le das puerta, ¡aire! ese puesto desde hoy es mío.
--Pero tú que coño sabes de negocios, pedazo de animal. Sin José Antonio al frente, matarías a la gallina de los huevos de ...