El abuelo voyerista
Fecha: 16/07/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: oscareduardo, Fuente: SexoSinTabues
Zoraida regresaba de la universidad pues no habían tenido clase por un paro de profesores, los estudiantes habían aprovechado para reunirse en grupos y charlar de temas intrascendentes…las amigas de Zoraida habían preferido temas más picantes que habían desembocado en el tema del sexo, se habló de todas las parafilias más conocidas, algunas de sus compañeras parecían muy versadas en temas que ella no tenía ni idea, le tocaba aparentar delante de sus amigas pues le daría pena confesar que a sus 18 años era virgen, sin embargo algunos temas le habían impactado y la tenían pensativa y muy excitada… lluvia dorada, voyerismo, sexo anal, cunnilingus… esas palabras pasaban por su mente pero ella no podía asociarlos a situaciones reales y tangibles, sus padres se habían separado y su abuela que la había criado sólo sabía lo básico del sexo, su abuelo casi no le hablaba pero a toda hora la miraba muy socarronamente y a veces sentía una morbosidad en esa mirada incisiva que prácticamente la desvestía. Ensimismada en esos pensamientos llegó al apartamento donde vivía y que según sus cuentas debía estar solo pues su abuela tenía que cumplir una cita médica, lo que ignoraba Zoraida era que su abuelo Mario no había querido acompañar a la abuela a la cita médica…la razón era muy simple y muy justificadora…el viejo zorro había descubierto que una vecina acostumbraba broncearse en la azotea del edificio vecino en prendas muy íntimas, solo usaba un delgado hilo dental que se metía en un par ...
... de nalgas carnosas y grandes y omitía el brasier pues le gustaba broncearse sus portentosas tetas para después lucirlas con sus blusas muy escotadas, la escultural hembra antes de acostarse en una toalla sobre el piso se aplicaba un bronceador que embadurnaba en sus senos y en sus piernas masajeándose de una manera sensual y provocadora… don Mario le había hecho inteligencia y ya sabía el horario y los días de la semana de ese espectáculo tan libidinoso … el día elegido por la mujer para su bronceado don Mario llevaba una silla y un par de binóculos para no perderse cualquier movimiento que le diera la satisfacción de ver el culo y ese hermoso coño de su vecina, en esas estaba don Mario cuando Zoraida llegó al apartamento, estaba en una pijama de calzón corto y masturbándose con la mano derecha mientras con la mano izquierda sostenía un par de binóculos…cuando Zoraida vio al abuelo estaba emocionado dándose un pajazo, su pene se veía nítidamente era largo y cabezón, al principio a Zoraida le causo hilaridad pero luego le dio afán de que su abuelo fuera pillado en una situación comprometedora y salió donde estaba el viejo preguntándole qué estaba haciendo…el viejo en lugar de asustarse la volteó a mirar con una sonrisa libidinosa y con unos ojos salpicados de lascivia, admiró a su nieta lo bonita que era, debajo de esa minifalda de jean estaba un trasero pequeño pero bien paradito, y bajo su blusa un par de senos como para chupar y degustar, sus pezones estaban erectos y se ...