La primera vez con mi hija menor 3 - Relatos Eróticos

La primera vez con mi hija menor 3

Cerca de las 19:00 horas preparé todo para que tomáramos la mediatarde, mientras que mi hija menor se preparó un baso de leche fría con cereales azucarados, la mayor compartió unos mates conmigo. Ninguno tocaba el tema de lo que habíamos vivido en la siesta, y el aire se notaba con una cierta carga que lo volvía pesado. Yo no podía apartar mi vista de los pechos de mi nenita, y a la vez cruzaba la mirada con la mayor, que sin decir nada parecía interrogarme . En mi cabeza no paraban de desfilar las imágenes de los cuerpos de ellas, recordando mis encuentros con ambas, lo que me estaba provocando una terrible erección . Tomo el primer mate, está muy caliente y siento como me quema la punta de la lengua , por lo que emito un sonido de dolor. La mayor se rie y me dice en forma sarcástica, ¨huy se quemó , ahora no va a poder lamer conchitas¨ ; su hermana la mira un tanto incrédula del comentario , poniéndose colorada como un tomate, entiende que alguien conoce nuestro secreto. Le sonrío mientras le contesto que hay cosas que las puedo hacer de todas formas y en cualquier momento; por lo que ella para cambiar de tema , toma el control del tv y lo enciende para dar un recorrido por la grilla de canales una y otra vez, sin encontrar nada interesante. Una vez que terminamos de tomar la mediatarde, me levanté de la silla y me dirigí al sillón del living ,donde tenía cargando mi notebook para ingresar a mis redes sociales y ver que había de nuevo. En la cocina de la casa mis hijas ...

... ya estaban terminando de lavar las cosas que habíamos ocupado . Había pasado un poco mas de media hora cuando Gaby , la mayor, se acerca a mi para pedirme que le prestara la computadora para controlar unas notas del colegio que ya las tendrían que haber publicado. Me hago a un lado del sillón y la invito a sentarse junto a mi, es cuando ella se inclina hacia adelante para tomar el aparato, puedo notar a travez de su escote, que no llevaba corpiño, la imagen de uno de sus pechos , me hace recordar como había disfrutado de estos . No los tiene muy grande , pero lo suficiente como para que no entren en mis manos, además poseen unos pezones pequeños, de un color pardo claro , que son verdaderamente hermosos y muy deliciosos. Al sentarse , apoya el aparato sobre la mesita ratona, por lo que para poder escribir en el teclado, se tiene que inclinar hacia adelante y sus caderas se ensanchan ,haciendo que su trasero se vea de una forma mas llamativa, si es que esto fuera posible. Su pantalón de jeans es de tiro muy bajo por lo que en su parte trasera no alcanza a cubrir el nacimiento de su hermoso culo, dejándome ver esa raya que me vuelve loco y que ya he conocido mejor que nadie. La tentación es mucha y yo no me resisto, por lo que aprovecho para acariciarle sus nalgas por encima del pantalón y pasando las yemas de mis dedos por el contorno del mismo , deteniéndome por momentos para introducirlos unos centímetros en medio de los cachetes y luego subir por el centro de su espalda, ...