Dos Hembras en VillaMacho - Cap. 1
Fecha: 17/07/2020,
Categorías:
Sexo en Grupo
Hardcore,
Autor: AkuSokuZan, Fuente: xHamster
... veces de falda, ocultando el pantaloncito de pijama que llevaba debajo. Sandra le explicó que, habiéndose desvelado, se encontró con su niña fuera de la tienda y decidieron ir juntas al interior de la casa. No tardó en llegar Andres y poco después Prono… Su marido se mostró escéptico a creer que no había sucedido nada, aunque le repetía una y otra vez que no las habían tocado.— Claro que han hecho comentarios y han mostrado interés, pero no es algo que pudiésemos evitar.— ¿Cómo no vas a poder evitar que digan esas cosas?— Estamos en su casa, Joaquin. ¿Qué podríamos hacer? ¿Volver a las tiendas y estar con los ojos abiertos lo que queda de mad**gada? Tenemos in…som…nio. -repitió enfatizando cada palabra-, vinimos aquí donde podíamos picotear y pasar el rato…— ¿Y Rob? ¿Por qué la niña no lo ha traído?— ¿Crees que despertaría al niño? -En todo eso tenía que darle la razón. No podía continuar la discusión por ese camino.— Y… ¿Qué te decían?— Solo gastaban bromas… Lanzaban indirectas, decían cosas para ver como reaccionábamos…— ¿¡Y cómo reaccionabais!?— Receptivas -confesó sin andarse con rodeos.— ¿Las dos? Con tu estúpido juego me lo esperaba. Pero… ¿De la niña?— Estamos en una casa que no es nuestra, habría sido incómodo si hubiésemos sido cortantes.Volvía a sentir ganas de largarse de allí a pesar de no llegar a hacerlo. Algo lo ataba a quedarse allí… Una mezcla de curiosidad y masoquismo, sin querer que pasase nada, necesitando saber si tenía que pasar algo. ¿Realmente quería ...
... su mujer hacer algo con aquel malnacido? ¿Haría algo si el fingía no darse cuenta? Todo en su interior eran contradicciones; emociones antagónicas que entre sí producían una constante y m*****a fricción. ``No, no seré yo quien rompa las condiciones de la apuesta´´ se decía demostrando una férrea fuerza de voluntad. Odiaba a Prono, pero este había dado en el clavo: Era hora de saber hasta dónde llegaban los límites del juego de su mujer.— ¿Qué os decían? -La actitud de Joaquin dio un giro de ciento ochenta grados, mostrándose mucho más receptivo; algo que ella lo pilló al vuelo.— Cosas como… que este pijama me quedaba muy bien, pero no tanto como el bañador… Que si nos apetecía comer algo mientras veíamos una película…— ¿Y qué respondíais vosotras? -le cuestionó asintiendo secamente.— Nos reíamos la mayoría de las veces… O les respondíamos con cosas sugerentes sin llegar a invitarlos. No sé si me entiendes -Le hablaba con voz melosa, como si le gustase su reacción o, por el contrario, que no reaccionase de otra manera.— No os tocaron…— No… Pero querían hacerlo -le dijo guiñando un ojo. Joaquin se tuvo que volver a morder la lengua a pesar de que, al mismo tiempo, no podía negar que le gustase lo que escuchaba-. Cariño… -empezó a decir ella agarrándolo por el brazo, sin estar segura de lo que iba a hacer.— No pasa nada. Estoy bien -se apresuró a aclarar antes de reanudar el intento de volver al comedor.— Lo que quiero decir es que tal vez deberías volver a la tienda -insistió ...