Las tetas de mamá V
Fecha: 25/07/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Vallekanito, Fuente: SexoSinTabues
... pasado una semana desde que abandonó su hogar y había pensado mucho en lo sucedido, se reprochaba haberse ido, estaba arrepentida, después de todo follar con su hijo y su marido era de lo más agradable, sus tetas echaban de menos los sobeteos de su hijo y su coño añoraba la polla de su marido. El calor del fuego y sus pensamientos hicieron que su coño despertara, se estaba excitando imaginando que su hijo llegaba por detrás y le agarraba las tetas con sus manos como tantas veces había hecho, se las acariciaba por encima de la ropa e introducía una por debajo de la camisa para sacársela del sujetador y acariciarla, como le agarraba la punta del pezón con sus dedos y se lo retorcía suavemente. No pudo más, se sacó allí mismo sus pechos use los acarició como si fuera su hijo quien lo hacía, se metió la otra !ano por debajo de la falda y en el mismo sillón en que estaba sentada se empezó a meter la mano en su raja. - Venga hijo, goza con las tetas de tu madre, susurraba, cometelas, son tuyas. - Como me gusta que me las sobre, sigue, sigue ¡Ah qué gusto! ¡Me corro, me corro! Dió un último suspiro y sacó su mano del coño toda empapada, había estado bien, pero necesitaba una polla, estaba dispuesta a volver a su casa y ser la puta de su marido y su hijo, al fin de cuentas eran una familia y a nadie le importaba lo que hicieran si ellos eran felices. Miguel llegó al pueblo y se dirigió a la casa de su abuela, no se cruzó con nadie por la calle, empujó la puerta y vio que estaba ...
... abierta, en el pueblo era poca la gente que la cerraba, no era necesario, empujó despacio, quería dar una sorpresa a su madre, se dirigió hacia el salón-cocina y oyó unos jadeos que venían del sillón que había frente a la chimenea, se acercó quedo y lo que vió le llenó de sorpresa y satisfacción. Su madre se acariciaba las tetas con una mano y la otra que tenía bajó la falda era evidente lo que hacía, Miguel había llegado en un buen momento, se sacó la polla y empezó a masturbarse viéndo a su madre, ésta estaba en lo suyo y no se enteró, se retorcía de placer en el sillón, se iba a correr. - Miguel, me corro, me corro, suspiró sin saber que Miguel estaba a su lado. Este no podía más, se iba a correr, se acercó a su madre y la roció la cara y las tetas con su semen. Pilar, se sobresaltó, miró hacia arriba y vió a su hijo con la polla en la mano, se levantó y le abrazo con fuerza, empezando a besarle con desesperación. - ¡Oh, Miguel, Miguel, que ganas tenía de verte, hijo! Miguel sintió las tetas de su madre contra su pecho, su camisa quedó manchada con su propio semen que embadurnada las tetas de su madre. La devolvió el abrazo y empezó a morrear la, la metió la lengua hasta la garganta, le subió la falda y bajándole las bragas le metió un dedo en el culo, lo que hizo que su madre diera un respingo. - Si, Miguel, si, juega con el culo de mamá, es el único agujero que te falta por llenar. Como te he echado de menos. - Y yo a ti, mamá, por eso estoy aquí. Mientras tanto la polla de ...