RIVALIDAD EN FAMILIA - Relatos Eróticos

RIVALIDAD EN FAMILIA

... pero al cabo de media hora, Minnie bajó de las escaleras y se dirigió a mi como si nada, maldita puta, quería estrangularla ahí mismo, pero para que me hacía pendejo yo mismo, ni enojado estaba, no se cómo le hice para mantener la calma, Minerva lucia algo aturdida, pero tranquila, así que pretextando no recuerdo qué, la tomé de la mano y salimos de la casa de mi tia, ni siquiera nos despedimos de nadie, sentía un furor sobre mi bajo vientre, al principio pensé que era coraje, pero no… estaba caliente, asi que tratando de controlarme y no ser muy obvio, la llevé a mi apartamento y simulando una borrachera que hacía rato se me había bajado, la empecé a besar apasionadamente, ella no opuso resistencia y me correspondió con la misma vehemencia, no me porté con brutalidad ni con salvajismo, pero fui mas agresivo que anteriores ocasiones, la follé duro y con intensidad, ella gemía extasiada, en ese momento se acumuló el coraje, los celos y la tremenda cachondez que sentía, solo quería castigarla por puta y lesbiana, y mi eyaculación en esa ocasión fue una de las más potentes e intensas en toda mi vida, cuando me vine me desplomé encima de ella y casi enseguida me quedé dormido con mi verga adentro de su vagina, ella me permitió hacerlo sin protestar No quiero aburrirlos describiendo el terrible conflicto emocional que me atormentó las siguientes semanas, ¿Qué debía hacer? ¿mandarla al demonio? ¿conservar un poco de mi dignidad? ¿confesarle lo que habia visto? Lo mas chocante es ...

... que ella no se mostraba arrepentida o en conflicto x lo que había sucedido, faltaba menos de 1 año para la boda, ¿debia suspenderla? Finalmente tuve que rendirme ante lo obvio, el pervertido que llevo en mi pudo mas que la dignidad y el sentido comun o el hecho de que yo era tremendo cornudo, y no tuve problemas en reconocer que estaba muy lejos de estar molesto, es mas, reconocí no sin cierto pesar y remordimiento que deseaba ver mas, deseaba que aquello volviera a repetirse , pero a partir de ese dia, Minerva se volvió mas reacia a visitar a mi tia, solo me acompañó en un par de ocasiones mas a visitarla y ambas se comportaban de la manera mas normal, nada fuera de lo ordinario, ni una miradita o una sonrisita, nada y eso que yo estaba al pendiente de las reacciones de ambas, aquella idea amenazó con convertirse en una obsesion, no puedo asegurarlo pero estoy seguro que volvieron a acostarse al menos una vez mas, lo supe cuando otra tia por pura casualidad me comentó que habia visitado a mi tia Yola y ahí se encontró con Minerva, no mencionó nada raro ni sospechoso , es mas, recalcó que cuando ella llegó, Minerva se despidió y se marchó, pero yo sentí que el corazón me dio un vuelco, no sentí celos pero lamenté mucho no haber estado ahí, la sola posibilidad de que hubiese ocurrido de nuevo y yo me lo haya perdido me llenó de rabia, incluso el dia de nuestra boda, la puta de mi tia Yola se presentó como si nada y nos felicitó a ambos con cariño y efusividad, lo único que ...