INFIDELIDAD 2: EN EL TRABAJO – SALIENDO A ENTREGAR MATERIALES Y SUPERVISANDO UNA OBRA
Fecha: 17/08/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... al servicio, entró y me encontró meando, le dije: –me duele y me arde mi potito, –ya va pasar amor, de apoco se va a acostumbrar a recibir mi pinga, soltó una carcajada –jajajaja. Y me beso en la frente. No nos percatamos de la hora, ya iban a dar las 7:30 am. , –tengo que llegar al trabajo temprano, llamó a su casa y contesto su mujer, tenía el celular en alta voz, la mujer le increpó –¿y tú dónde amaneciste? –te cuento al medio día amor, me quede en la supervisión de la obra, el alcalde se tomó de más y no podía dejarlo, y nos quedamos, recién estamos bajando, amor voy directo al trabajo, ya te platico a la hora del almuerzo. Algo disconforme la mujer contesta: –te creeré pues, bueno te espero almorzar, y este loco termina diciendo, –me esperas en la ducha, te quiero encontrar calata en la ducha, la mujer, –chistosito, ya me voy, voy a llevar a los niños al colegio, –está bien amor, cuídate, hablamos. –Calatita no, le dije; abrió las llaves de la ducha, y me llevó hacia el agua, –espera mi cabello no, va demorar secar, ya estaba en medio de la ducha, al sentir el agua en mi culito me ardía, –me duele, le insistía, se puso detrás mío y me empezó a jabonar, por mi espalda y pasaba por delante frotando mis pechos, –ya apúrate te vas hacer tarde al trabajo, –junto a ti, que me corran del trabajo y del mundo si es posible, jajaja, de nuevo ya tenía la pinga erecta, con muchos celos le dije: –demuéstrame como le vas a cachar a tu mujer en la ducha, no le hice esperar, empiné mi ...
... culito hacia él y apoye mis manos hacía la pared, sin mediar palabras me la empujo, –así puta, me gusta que estés muy perrita por mí, tu culo me lo voy a llevar a casa para partirte todo los días, –sí, me fascina tu pinga, envidio a tu mujer lo que se come todo los días, –nada que todo los días, a veces no quiere, –mételo y calla, le grite, ya estaba toda una loba en celo, me incline bajando la tapa del inodoro, él se fue de sí mismo, y nos encontrábamos en la gloria, me la empujó, fue brutal la cogida allí, por detrás me levantaba las piernas, estaba al aire y el me bombeaba la conchita en la pose del perrito, ya perdíamos el aliento, me empezaban a temblar las piernas, sentía que me caería, finalmente termino dentro, de nuevo, ya lo disfrutaba, puesto que me faltaba muy pocos días para mi regla, y no corría riesgo alguno. Nos bañamos como marido y mujer, y tome algo de tiempo en secar mi cabello, –y el gel, le pregunte, – pues lo tenía en mi bolsillo, ya se había aplastado y se estaba derramando, lo compre junto con tus ropas, –a mira tú, piensas en todo. Me alago de sobremanera que me ayudara a vestirme, me ponía las prendas como si fuera su bebé, luego alistamos todo, bajamos para dejar las llaves y salir, para algo de comodidad ya no estaba el señor Miguel, estaba Carmen, su hija, que muy amablemente nos despidió y abrió el garaje, esta vez le dimos 20 soles de propina, y agradecidos nos despedimos. Rumbo el trayecto a casa, me iba acariciando las piernas y metiendo mano ...