Incubo (1 parte) - Relatos Eróticos

Incubo (1 parte)

... encerré en mi cuarto y mire la cámara, saco de su bolsa una revista para adultos la puso en la cama y luego saco su playera, se puso su playera de dormir y se acostó a ver la revista, después de estarla hojeando un momento se levantó y verifico que estuviera bien cerrada la puerta y se regresó a la cama, allí se desnudó completamente y se recostó en la cama, yo estaba que babeaba, que hermoso cuerpo tenia, su pubis apenas y tenia una ligera capa de vello, significaba que se cuidaba su parte intima, por la posición de la cámara tenia palco preferencial, una vista espectacular, con el zoom activado, observe su pubis, con poco vello, su sexo rosado y liso, y sus pechos no exagerados, pero como dos naranjas y sus pezones, pequeños pero parados, acompañados de dos pequeñas aureolas que coronaban sus pezones… se acomodó en la cama y estuvo así mirando la revista, y por momentos acariciándose el sexo, después de un rato estaba dormitando y finalmente así se quedó dormida. Yo Salí a la cocina por un vaso de leche, y a tomar aire porque tal espectáculo me sobrecargo, pero no sabía lo que me esperaba ver, regrese rápido a mi habitación y continúe mirando, después de un rato, sería como hora y media, ya pasadas las 12 de la noche, la revista, sin razón aparente cayo de la cama, eso me alerto, después de un breve momento, la mano derecha que yacía sobre su estómago se movió despacio, hasta quedar a la altura de la cabeza, acompañando a la otra mano que estaba ya del otro lado de la ...

... cabeza, al mismo tiempo que se movía la mano, ambos pezones de ella estaban siendo movidos, de manera lenta, pero como circulando, después de un rato, la respiración en el estómago de Eva anunciaba ya que estaba excitándose, dormida ella, movió la cara hacia el lado contrario, y la pierna derecha la separo de la otra, formando un 4 con las piernas, su excitación era más evidente, después con ayuda del zoom, note movimiento en su vello púbico, en su monte de venus, y claramente se le veía el hilo de secreción, el lubricante natural de toda mujer excitada, salía ya de entre su sexo, pero algo la comenzó a acariciar, porque dicho elixir empezó a esparcirse hacia arriba, y una ligera separación en sus labios vaginales avisaban el ingreso de algo de manera leve entre si vulva, y este lubricante en un rato ya bañaba toda la entrada vaginal, por primera vez de entre sus labios pude ver su clítoris, rosado y muy lubricado, llego un momento en el que mi hermana de manera natural y por la excitación que ya tenía, abrió más las piernas, para dejar un acceso más directo, y en su sueño profundo no despertaba aun con lo excitada. Siguió avanzando aquello, ya era un claro movimiento de masturbación, se abrían y cerraban sus labios vaginales como si un dedo invisible estuviera masturbándola, incluso el movimiento de sus pezones ya era más intenso, definitivamente un incubo estaba actuando sobre mi hermana y se estaba preparando para violarla, después de bastante tiempo así, el arqueo del cuerpo ...