A escondidas - Relatos Eróticos

A escondidas

... acostarte con cualquiera El rostro de el dibujaba ira y placer, el rostro de ella hiba cambiando con cada embestida hasta que tuvo un orgasmo que la hizo contraerse, trato de safarse con las pocas fuerzas que tenia pero el no la solto y durante varios minutos la siguio penetrando hasta que el se vino dentro de ella en un profundo gemido. Ella se lo quito de ensima, comenzo a vestirse mientras el la miraba sentado en una silla aun desnudo. -Ya me voy a ver cuando repetimos- dijo ella con voz picara -A donde vas? -pregunto el - si quieres vamos a mi casa -No puedo tengo asesorias especiales en ingles hasta luego. -salio sin reparo alguno -A pero que putita salio- miro hacia abajo para levantar el boton de la prenda de Susana fue subiendo la vista lentamente hasta que vio mis ojos atravez de los agujeros del armario- espero que te haya gustado que la proxima eres tu Luan. Continuara.