1. Mi hijo y su amante


    Fecha: 28/08/2020, Categorías: Voyerismo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Caminaba en la hacienda donde vivíamos hacía 2 meses y decidí subir a un mirador donde nadie iba entre semana. Me llevé una sorpresa al ver la camioneta de mi hijo y en el centro de la loma yacían el y un hombre negro. estaban completamente desnudos y se besaban con gran ternura y deseo.
    
    Me oculté tras unas matas y miré como aquel hombre se montaba a mi bello hijo como si se tratara de una mujer, y por sus gemidos comprendí que ambos disfrutaban plenamente aquello. Al acabar se besaron y acariciaron largamente, luego mi hijo lo satisfiso oralmente con gran deseo, bebiendose su semen con gran deseo.
    
    Después de un rato vi como se vestían y el hombre negro le puso un hilo dental a mi hijo mirando sus nalgas con deseo. Volvieron a besarse unos minutos y partieron.
    
    Esa escena me tuvo muy excitada toda la tarde, al ver a mi hijo en la noche le dije que necesitaba hacer un trabajo para mi curso de fotografía y quería que él me ayudara. Accedió y la mañana siguiente lo hice desnudar y posar como una mujer para mi, luego le puse uno de mis hilos, lo maquillé tomandole fotos, y lo vestí muy femenina y provocativamente.
    
    Al terminar le dije: Miguel, que bella te ves, cualquier hombre al verte así te desearía, y si ve tu lindo trasero no podría contenerse y hacerte el amor.
    
    Mi hijo me miró sonrojado y le dije: tengo que irme, no tengo acetona para quitarte la ...
    ... pintura de las uñas, pero voy a comprar y te las quitas cuando vuelva. Deverías salir a pasear por la hacienda vestida así, haslo y me cuentas como te sentiste.
    
    Salí y subí al mirador escondiendo mi carro. Oí que llegaba un carro, era el de mi hijo. Salió del carro y lo ví caminar vestido y maquillado femeninamente, parecía una chica hermosa. Miraba el reloj y oí otro carro, de este bajó el negro, quien lo miró y se acercó excitado a mi hijo besandolo con ternura y deseo. Sentí envidia de las muestras de afecto y lujuria entre ellos. Se hicieron el amor sin apuro, larga y cadenciosamente, oía sus gemidos de placer y tuve que masturbarme. Hiceron el amor 5 veces en unas 4 horas. Mientras el negro eyaculaba por 5ta. vez en el ano de mi hijo, llegué a su lado. Ambos gemían como locos y no notaron mi presencia. Al terminar me vieron y se separaron asustados.
    
    Tranquilos les dije, está bien. Noté el largo y grueso pene de aquel hombre y me excité. Mi hijo dijo: Mamá yo..., le hice un gesto que callara y le dije: Hacen una bella pareja, no tengo ningún prejuicio, solo ten cuidado de que tu padre no se entere, y ya que son pareja, creo que deberían dormir juntos en la casa cuando tu padre viaja, y eso es 3 o 4 días a la semana.
    
    Los invité a cenar y esa noche les propuse hacerles unas fotos y desde entonces puedo oir sus gemidos en la noche 3 o 4 días a la semana 
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