1. La hija de mi amante


    Fecha: 22/09/2020, Categorías: Incesto Autor: Danygun, Fuente: SexoSinTabues

    ... pero me dijo que no me daría una mamada por qué no le había gustado mucho, poco después insistí y accedió por unos pocos minutos. Me sorprendí de sus habilidades para abrazar y besar y darse gusto restregándose que no pude guardar la pregunta de que si con alguien había echo algo así, me respondió que sólo se había dejado tocar por el niño que le enseñó a masturbarse pero no había dejado que pasara a más por las imposiciones de su madre, y que ella sólo quería estar conmigo, me sonreí, retire su corpiño y de inmediato empecé a lamer sus botoncitos mientras ella acariciaba mi cabello y soltaba gemidos que ya no disimulaba ni controlaba, el calor que sentía de su cuerpo me llevaron a recostarme y subirla encima de mi en un 69 donde pude quitar su pantaleta y por primera vez podía ver sus labios vaginales muy rosaditos por tanto restregón, quede un momento admirando la escena hasta que sentí como se metía mi falo en la boca, con cuidado abrí sus labios y probé con la lengua sus jugos que no tenían aroma y sólo un sabor ligeramente acidito, y una cavidad que se veía imposible de penetrar con mi falo. Empecé a acariciar su diminuto clitoris y eso hacía que sus chupadas fueran más intensas, y por momentos me decía “ para Dany para” eran sus orgasmo que yo saboreaba succionando su cavidad los flujos que tenia, hasta que después de un rato sentía eyacular, ella quedaba sorprendida de tener mi semen es su boca, trago lo que pudo y se fue al baño, era inminente que había sido una ...
    ... sorpresa para ella. A los pocos minutos regreso recostándose en la cama, no me había percatado de lo blanco que era su cuerpo un tanto más que el de su madre, me subí sobre ella y restregando mi miembro sobre sus labios vaginales su clitoris, con mi boca quería comerme sus tiernos botoncitos, y sus labios rojos que hacían un impresionante contraste con su piel blanca. Después de que ella tuviera un par de orgasmos y yo uno más llegaba el momento de penetrarla abrí sus piernas, ella sabía lo que seguía y parecía no perder detalle de cada movimiento, coloque mi falo en su cavidad empujando muy suavemente y ella subía el tono de sus gemidos ya tenia una mi glande dentro de ella, sentía un inmenso calor, que me llenaba de lujuria y me llamaba a empujar más, cuando vi una pequeña lágrima, que provocó un alto total, llevándome a recostarme al lado de ella mientras acariciaba su pelvis y sus pequeñas tetitas, mientras ella me decía, discúlpame Dany pero me dolió mucho. La abracé y quedamos así dormidos a la 1 de la madrugada increíblemente habían pasado 5 horas de nuestros jugueteos. Por la mañana cuando llegaba su madre ya había puesto todo en orden. Yo trataba de dar explicaciones tontas y ella se reía y preguntaba que como nos había ido. Paola respondió casi al momento, muy rico pero no pudimos. Pasamos varios meses y Paola participaba activamente en nuestras sesiones sin ser penetrada, solo metía parte de mi dedo medio muy suavemente, hasta que una semana antes de sus doce años ...