CUADRILATERO INCESTUOSO Y BISEXUAL CON MI HERMANA, MI AMIGO Y SU HERMANA - Relatos Eróticos

CUADRILATERO INCESTUOSO Y BISEXUAL CON MI HERMANA, MI AMIGO Y SU HERMANA

... solté su polla, sacándola de mi garganta y boca, consiguiendo impedir su eyaculación, pues quería mantenerlo excitado, y que acumulara mucha más leche para mi degustación en mi lengua y paladar, mientras yo mismo me recuperaba de la corrida que me había sobrevenido durante la competencia de selfsuck que sostuve con Andrés. Entonces, ya que ta has dado todo el gusto del mundo comiéndome, besándome, lamiéndome, mamándome y chupándome huevos, glande y polla, ahora seré yo quien pruebe la tuya, dándote todo el gusto que le sé ofrecer a unos huevos y a una polla, que como los tienes, por su tamaño, belleza y estética, merecen ser bien servidos, y espero no ser inferior al gusto que tú has sabido bien darme, al punto de casi hacerme correr. Tras esta caliente y atenta declaración, Andrés pasó a atenderme los huevos, el glande y la polla de la misma manera, con la misma intensidad y en el mismo orden que yo había procedido con él, como si proceder de igual forma que yo, fuera plena garantía de conseguir satisfacerme tal cual yo lo había conseguido con mis orales, linguales, labiales y bucales servicios. Cuando empezó a comerse y tragarse mi considerable pija, pude ver nubes y constelaciones, llevándome al propio paraíso, completamente embargado de placer y excitación como pocas veces lo había vivido con mis amantes, ya fueran chicos o chicas, de suerte que sus lengüetazos, lamidas, chupadas, mamadas y comidas de mis huevos, glande y polla me resultaban francamente excepcionales. ...

... Tras unos instantes de comerse y tragarse mi polla, Andrés estaba apunto de hacerme correr, de lo cual le advertí con el propósito de que diera por terminados sus nobles servicios sobre mi excitada verga, lo cual accedió inmediatamente, para satisfacción mía, consiguiendo yo seguir acumulando leche para su posterior degustación, y para mayor placer mío, pues todavía esperaba poder aguantar la eyaculación por al menos una hora más. Tras nuestros mutuos servicios de sexo oral sobre nuestros huevos y pollas, teníamos aquéllos duros y repletos de leche, y éstas completamente enhiestas y duras. Excitado, caliente y cachondo a tope tal cual yo lo estaba, Andrés me preguntó sobre qué cosa practicaríamos ahora para satisfacer nuestro infinito deseo y nuestra inmensa lascivia, ante lo cual le propuse que volviéramos a lamernos y chuparnos nuestras propias pollas, pero esta vez sin competir, y obviamente sin corrernos, pues aun era media tarde. Entonces ambos nos pajeamos lo suficiente para poner nuestras vergas a tope, tras lo cual, los dos (2) al tiempo, nos inclinamos descendiendo sobre nuestros glandes con nuestras lenguas, lamiéndonos nuestros glandes, lo cual hicimos unas cinco (5) veces, para luego proceder a chuparnos toda la porción de polla que ambos pudimos. Tras aquella sesión de autofellatio o selfsuck terminamos súper cachondos y súper calientes, no pudiendo estar más excitados, deseosos y ansiosos de lo que estábamos, ante lo cual le propuse a Andrés que leyéramos relatos ...