Felizmente violada - Relatos Eróticos

Felizmente violada

... el caño del mismo en la entrada de mi culo, sentí el frio del caño y me tranquilice pues entendí que corría mucho peligro él me dijo --- quédate quieta putita a ver si el caño te calma o te gusta? – Solo atine a responderle – no, no me haga nada por favor--.

Enseguida siento ruidos en el departamento que no me tranquilizan, luego el que me tiene encañonada comienza a tocarme el culo de nuevo más suavemente diciéndome --- que buena estas putita --- y dirigiéndose a mi esposo –este culazo te estas comiendo --- y – se ve que es muy puta porque usa hilo dental--, --si me permites la voy a probar—Sus palabras no me gustaban nada pero sentía una sensación especial el caño del revolver empezaba a tomar una temperatura normal y el comenzaba a enterrarmelo mas en el culo, esto a pesar de la situación comenzaba a excitarme sus manos me hacían sentir sucia pero excitada a la vez. Como mi esposo no contestaba pues estaba amordazado el hombre le dijo --- pues como no dices nada veo que no te importa lo que haga con ella--- y yo – no por favor no me haga nada--- aunque en el fondo sentía mucha excitación, entonces él dice –a ver de tetas como estas?—y sube la mano que tenía en mi culo por mis costillas hasta uno de mis pechos agarrándolo con sus cinco dedos con firmeza. Mis pechos se pusieron duros de la excitación y estaba a punto de correrme pero trate de controlarme para que no se diera cuenta, y el –mmm estas bien durita se ve que te está gustando Verdad?--- y yo intentando ...

... disimular --- no noo por favor no me haga nada—el gritando a sus secuaces – apúrense que les tengo recompensa---- mientras comenzaba a sobarme las dos tetas con su enorme mano, yo no pude más y disimuladamente solita me iba introduciendo aún más el caño en mi culo, quería gemir pero hacia fuerza para no hacerlo, comenzaba a sentir mi vagina húmeda, en eso siento ruidos y entran dos ladrones más encapuchados con dos bultos de cosas envueltos en las frazadas de nuestra cama.

Trate de tranquilizarme y les implore – por favor no nos hagan nada llévense eso si quieren pero váyanse por favor--- al ver a los otros dos sentí mucho miedo, y el del revolver – cállate putita que ahora vas a gozar--- los otros dos riéndose --- uyy sí que esta buena y parece bien puta---- al oír eso me saque onda si bien estaba excitada no sabía hasta donde llegarían esos tipos y eran 3 y un arma contra una ( ya que a mi esposo ni lo podía contar así como estaba). Entonces el que me encañonaba dijo --- muy bien puta ahora chúpaselas--- al tiempo que los otros dos sacaban sus vergas y las ponían frente a mí, el del revolver me obligo a ponerme en 4 patas mientras yo le imploraba --- no por favor —

Una vez yo en esa posición él me jalo del cabello una vez más haciéndome abrir la boca para gritar cosa que no pude lograr ya que al abrir la boca los otros dos rápidamente metieron sus vergas en mi boca ¡¡¡ los dos juntos, yo no podía ni quejarme pues tenía la boca atascada de vergas a pesar de lo abrupta de la ...