Los amigos de papá (la alberca) - Relatos Eróticos

Los amigos de papá (la alberca)

... círculos y dando brinquitos, pues me gustaba esa sensación, con Ricardo se dio cuenta y me dijo tranquilo chaval que te vas a hacer daño, don Mario se dio cuenta y dijo, ya Ricardo deja que el niño juegue con nosotros también, y me pidió que me sentara ahora en sus piernas, yo seguía con los brincos y solo veía la cara de felicidad que se le pintaba a don mario, don vero de pronto dijo. compadres apúrense que ya casi llega el papá de este chamaco. Me turnaba para sentarme en las piernas de los 3 maduros que cada vez se les notaba la ereccion y el bulto en el short, de pronto don Mario se saca por un lado la verga y yo quedé asombrado viendo esa tremenda verga que al parecer media no menos de 18cm. Diciendo ven siéntate en mis piernas, me bajo un poco mi trusa y puso su verga entre mis nalguitas, y la refregaba, a mi me gustaba esa sensación, don Ricardo y don vero hicieron lo mismo, yo no dejaba de ver esas ricas vergas. De pronto don beto me dijo que me la metiera a la boca, yo al principio no quise, pero me lo hizo con tanto cariño que no pude evitar probar la puntita, yo se la mamaba muy torpemente, ninguno se paraba de las sillas solo me veían y se maturbaban, uno a uno fui probando sus vergas, cuando se la estaba mamando a don Ricardo, de pronto sentí como respiraba más rápido y me apretó la cabeza contra su verga, me la metió tanto que sentía ganas de vomitar y sentí cómo entraba algo en mi garganta. mientras bufaba muy fuerte, los demás se rieron y dijeron ya le diste ...

... de comer al putito. Yo no entendía muy bien, pero me gusto el sabor, don Mario dijo ahora hay que llenarle el culito de leche, a lo que sonreí aunque no sabia que significaba tenia muchas ganas, sentándome en sus piernas pasándome la verga entre mis nalgas, me puso saliva en mi culito y me metió un dedo, me dolió pero no mucho, y así estuvo hasta que metió dos y luego tres. de pronto me alzo más y coloco la punta de su verga en mi hoyito, sentí como me iba abriendo poco a poco, a mi me dolía y le decía que ya parara, pero el lo hacía lento y me decía ya casi entra. don beto vigilaba que no regresara mi papá. De pronto sentí un ardor no fuerte pero si que me hizo sacar un suspiro, y fue cuando me dijo ya la tienes adentro chamaco, don Mario me alzaba de las caderas como si fuera cabalgando. y solo decía que rico, culito, aprietas bien rico. mmmm s te va toda chiquito, don beto le decía apúrate compadre, mientras se masturbaba y veía con una sonrisa como me cogia. Don Mario estaba en el vaivén cuando me apretó fuerte contra el gimiendo y dando un fuerte suspiro. mmm ay que rico culito. me vengo cabroncito, toma mi leche. yo sentía como esa verga se hinchaba adentro de mi culo y sentía correr algo caliente en mi interior, me ardía pero también me gustaba demasiado, sentí como saco esa verga de mi cielo y escurría un poco de líquido blanco y un poco de sangre, don beto dijo rapidamnente, ven chiquito ahora me toca a mi. Me agarro sin más prisa y de un jalón me la comenzó a meter, ...