Continuación: No puedo creerlo... tuve relaciones con mi suegro.
Fecha: 08/10/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: fabiolachicasexy, Fuente: SexoSinTabues
Más aún, estar ahí, desnuda frente a él, frotándome lo que quedaba de su néctar en mis tetas, me hizo pensar que tal vez esto ya no se repita. -Ven nena, te daré lo que estabas esperando- me dijo apretándose la verga que se conservaba aun dura y palpitante. - no puedo esperarlo- y me acomodé en el otro sillón, puse mis rodillas sobre el sillón y mis pechos contra el respaldo, algo así como estar en 4, ofreciéndole mi cuerpo a su entero gozo, mirándolo de una forma tan morbosa, pasando la lengua por mis labios y haciéndole ruiditos de gemidos. Tan pronto como me vio en esa posición, como si fuera un resorte se paró dirigiéndose a mí, tomando su verga en su mano y frotándola de atrás hacía adelanté con calma. Te prometo que te haré gemir tanto que no podrás hablar en varios días. No lo diga, hágalo. Deseo sentirme penetrada por un pedazo de carne tan suculento. ¿Qué mi hijo no te da como quieres? Sí lo hace y muy bien, pero no tiene las dimensiones de usted, me encantan los penes gruesos, me enloquecen. Lo que le dije lo calentó tanto que de inmediato hundió su cara entre mis carnosos glúteos, mordió mi tanga y con mucha habilidad me la bajó, sin usar ni un dedo, solo sus dientes. La dejó a la altura de mis rodillas y con una agilidad impresionante me metió su lengua en mi conchita, sentí un hormigueo por todo mi cuerpo al sentirla dentro, hacía círculos, la movía de arriba a abajo, lo que más me prendió fue cuando puso totalmente rígida su lengua y la metía y sacaba, no ...
... miento, se sentía como si fuera un dedo. Me arrebató varios gemidos y me sentí un poco avergonzada al tomar su cabeza con una de mis manos, apretar su cara contra mi rajita y suplicarle que me diera más, era delicioso, nunca me lo habían hecho así. Ya no puedo, aah, aaaah, meteme la verga, ummmmmm. De acuerdo nena, agarrate del respaldo y saca más tu precioso culo, que esto será intenso. Lo hice y frotó mis nalgas haciéndome saber lo mucho que le encantaban. Dirigió la punta de su verga a la entrada de mi vagina e hizo lo que prometió: hacerme gozar tanto que quise gritar del placer pero ahogando mis gemidos en una almohada para no despertar a mi novio, aunque era poco probable que lo hiciera de todos modos. Aaaah, aaaah, aaaah, aaaah, aaaaaah, si si si si siiii, mmmmm me encanta, siii me encanta. Aag aaag mmmm. Estuve así sin parar de gemir como 10 minutos, no quería que dejara de cogerme nunca, me hacía sentir caliente y deseosa de más. Y si bien, era delicioso hasta ese momento, cuando aumento el ritmo fue el total orgasmo, tanto que tuve dos casi seguidos. Se apoyó en mi espalda hundiendo mi parte media casi pegada al sillón dejando totalmente parada mi cola, era impresionante, me daba unas embestidas tan profundas y rápidas que creí que me desmayaría del placer. Siii amor, estás súper apretada, ummm, exprimes mi pene Sii, quiero sacarte hasta la última gota papi, Síííííííí Sí, dime papi, zorrita. Ummm papi, papi, aaag metemela más. Sí chiquita, te voy a dar toda. Y en ese ...