EL INCESTO EN MI VIDA (PARTE 14)
Fecha: 12/10/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: juangm78, Fuente: SexoSinTabues
Me desperté y me quede contemplando a mi sobrina aun dormida en la cama, me levante y me fui hacia el cuarto de baño, me duche, me afeite y salí a vestirme, mientras me anudaba la corbata, Sandra se despertó, me acerque a ella y la bese con dulzura, le dije que se duchara y vistiera para bajar a desayunar, ella me respondió que no le apetecía, entonces le propuse que si quería mientras se arreglaba yo bajaría a tomarme un café y así saldríamos antes hacia la feria, me dijo que le parecía bien. La cafetería del hotel disponía de terraza y me senté allí para tomarme el café y fumar un cigarro, aproveche para llamar a mi mujer, que todavía se encontraba de vacaciones con sus padres en la playa. Ella sabía, porque se lo había dicho por teléfono, que su sobrina se encontraba conmigo, ya que le había contado la misma mentira que a su hermana, diciéndole que ella dormía en otra habitación, cuyo pago lo hacia los organizadores y proveedores de la feria. Le estuve contando que le tuve que comprar un traje por culpa de que su ropa era demasiado informal, no le dije que también le había comprado una para la noche, ella se reía y me decía "¿que esperas de una niña?" yo le daba la razón e intentaba convencerla de que me tenía que haber callado y no haberla invitado, mi mujer me consolaba diciéndome "pobrecilla, le hace ilusión ir de viaje y ver sitios nuevos", en aquel momento empecé a tener un poco de remordimientos, ya que mi mujer no podía ni imaginar lo que Sandra y yo hacíamos, pero ...
... se pasaron de seguida ya que mi sobrina apareció por la puerta, estaba increíble, no parecía ni ella, aquel traje de chaqueta le sentaba de fabula, sus piernas perfectas cubiertas por unas medias que brillaban, su culo realzado por la falda ajustada, esa chaqueta abrochada que hacía que se le viera el canalillo, por donde se podía ver unos pocos milímetros del sujetador negro, que la tarde antes le había comprado, su pelo rubio alisado, perfectamente maquillada, cualquier persona que no la conociera podría pensar perfectamente que tenía unos 20 años. Me despedí de mi mujer, cogimos un taxi y nos fuimos hacia la feria. Pasemos toda la mañana visitando stands de proveedores y clientes, como dije anteriormente, la visita a este tipo de eventos era más por compromiso que por otra cosa. Lo que más me estaba gustando era ver como todos los hombres miraban a mi sobrina, yo no la presentaba como tal, sino como una estudiante que había empezado en mi empresa como representante en prácticas. Llego la hora de comer y nos dirigimos a un restaurante que se encuentra dentro del recinto, durante el almuerzo le pregunte que le parecía la visita, ella me contesto que le estaba gustando pero que no se enteraba de nada de lo que hablábamos o nos enseñaban, le dije que era normal y le propuse que si quería nos podíamos ir, ya que tampoco me estaba siendo productiva esa visita y estaba harto de dar vueltas, ella acepto diciendo que haríamos lo que yo quisiera. No me lo pensé y volvimos al hotel, ...