Una visita a la Feria
Fecha: 22/10/2020,
Categorías:
Confesiones
Autor: txuso, Fuente: CuentoRelatos
... subido y la acaricié sobre la tela con mi mano entre sus piernas. Ella al sentirla se detuvo y separó un poco las piernas para facilitarme el camino. Yo le acariciaba el coño desde atrás sintiendo una erección enorme. La pareja nos seguía el juego, pero fue él quien dio el paso y se la sacó, para que ella se la cogiera y manoseara. Mi amiga al ver eso se encendió más aún y agarró mi polla por encima del pantalón, moviendo la mano de arriba a abajo con la excitación plasmada en la cara, me encantaba ver ese rostro cuando mostraba deseo. El actor disfrazado de zombi salió por sorpresa y podemos decir que el susto se lo llevó él. Se quedó mirándonos unos segundos hasta que dijo, “viene gente”. Nosotros nos repusimos y seguimos caminando, ardiendo los cuatro. Por desgracia llegábamos al final y tuvimos que salir.
Otra vez caminado entre gente, luces y olores varios. La pareja resultaba buena compañía, habían entendido lo que nos gustaba y además eran una buena compañía. De vez en cuando veía como él ponía la mano entre los cachetes de ella, aplastando su falda. Decidimos ir a la noria, era nuestra atracción favorita porque fue la atracción donde empezó todo para nosotros, así que siempre que íbamos la noria era insalvable, era el culmen de nuestro paseo feriante. Nos pusimos en la cola bien pegados hasta que conseguimos nuestros billetes.
A la pareja le explicamos el motivo por el que queríamos subir en la noria, les pareció divertido y quisieron acompañarnos, pero mi ...
... amiga se vio en la obligación de prevenirlos.
—Lo que pasa es que aquí... Se nos va un poco la mano, ¿entendéis?
—Creemos que sí —dijeron ellos– pero si preferís subir solos, lo entenderemos.
—No, no es eso. Lo que quiero decir es que la última vez, por ejemplo, nos masturbamos ahí subidos.
—Pues nos encantaría ir en el mismo cochecito y jugar juntos – alegó ella.
Entonces llegó la hora de subir. Nos acomodamos en un carrito, sentados unos frente a otros. Aún si haberse movido la noria mi amiga me puso la mano sobre la polla, que había perdido un poco la erección, pero reaccionó a su tacto. La pareja nos miraba y ella hizo lo mismo con su acompañante, pero separó las piernas y subió la falda, dejándonos ver lo bien que le sentaban las diminutas braguitas. La noria empezó a moverse lentamente, elevándonos hacia el cielo negro de aquella noche. Cuando estábamos a unos metros del suelo bajé mi cremallera y me la saqué para que mi compañera jugara con ella con mayor precisión. Él me copió. Así estábamos las dos parejas, una enfrente de otra, disfrutando de que nos masturbaran. La chica tuvo una idea, retiró la mano de la polla y se quitó las bragas, haciendo que el carrito se balanceara para mayor excitación, después las guardó en el bolso. Entonces volvió a subirse la falda y a abrir las piernas, dejándonos ver su depilado y delicioso chochito. La vista hizo que mi polla endureciera al máximo, mi amiga se mojó la mano y aceleró el ritmo, mientras yo le metía la mano ...