MI AMANTE - Relatos Eróticos

MI AMANTE

Su marido, un hombre fisicamente normal ni alto ni bajo ni gordo ni flaco, la primera vez que realmente me fijé en ella fue en el supermercado bian los dos por las calles del super y yo igual yo iba en chandal, he de decir que tengo 54 años, iba en chandal, pero esa mañana tenia la polla juguetona, iba empalmado justo cuando nos ibamos a cruzar y yo salía del carro para coger un producto y al volverme a un lado vi su mirada no a mi sino a mi chandal, se me veia un bulto enorme, a un lado, ella no dejaba de mirarlo me volvi a refugiear en el carro pasaron ella callada él no se habia dado cuenta de nada, y yo me acomodé cuando pude el nabo, pasaron los dias yo ya ni me acordaba de aquello, menos aun sacar nada en claro cuando una mañana al entrar en el salón la ventana de ella, estaba abierta y ella primero iba vestida pero abandonó la estancia, yo no estaba observandola de forma lasciva ni nada comencé a desayunar y al poco miré, cuando la vi en sujetador, un sujetador negro y la falda, ella se paseaba por la estancia haciendo cosas, pero jamas antes las hizo asi, empecé a mirar, ya descaradamente y ella a hacer como que no se daba cuenta, asi estuve bastantes minutos, hasta que miró y lentamente fue a la cortina y la bajó. Por mi experiencia empecé a saber que quería algo conmigo o mejor con mi polla, su marido no debía tener gran cosa y a ella le gustaria tener una buena polla, verla antes de morir, seguro, aún así, antes de dar algun paso, esperé si ella quería algo ...

... repetiria el juego, no me equivoqué me hizo esperar varios dias pero volvio a repetirlo, solo que esta vez, con un camison transparente de dormir blanco y bajo ellos unas bragas negras y sujetador para que constrastara bien todo, eso me sacó de dudas ahora era como estar a solas con ella y tener una cita, pero no hizo falta, pues dias despues de nuevo en el salón vestida, miraba descarada a mi ventana me veia claro y yo a veces la miraba ella se levantó y abandonó el salón yo me asomé a la ventana, al poco la vi salir del portón por un instante miró hacia arriba a mi ventana no necesité ninguna señal más, la vi caminar por la acera lentamente miró hacia atras y me vió acercarme ya no volvió a mirar mas, yo iba lanzado a salir de toda duda, aunque pocas dudas habia para mi a esta le iba los maduros y las pollas grandes y su marido le daba poca guerra ese era mi veredicto. Llegó a una de las paradas de bus ya alejada de la parte donde eramos mas conocidos subió, yo subí pero ella ya se habia sentado y junto a alguien imaginé que alguien del bus la conocia, ella me miro una sola vez una fracción de segundo yo la mire varias veces, sabía que estaba a punto de caramelo, que quería que no me habia equivocado, el bus arrancó unos 20 minutos despues ella se bajó y yo tras ella, apenas, caminó yo intentaba alcanzarla, ella entró en el parqué yo ya a dos metros de ella, al fin la alcancé y ella se dejó alcanzar y le dije un hola ella lo devolvió, vi un bar dentro del parque al instante le ...