Cogiendo con un semental maduro - Relatos Eróticos

Cogiendo con un semental maduro

... jijijijijjiji y me dedicaría una a mi también jijijijijijij Bueno, era hra de regresar a casa, cuando llegué frente a la casa de don José sentí pena por mi estado de ebriedad, así que no le hablé puesto que ya eran como las 2 am, creí que a esa edad ya solo estarían durmiendo jijijijij pero paso que no encontraba mis llaves. De pronto escucho que alguien estaba atrás de mi, cuando voltié me di cuenta que era don José, muy educadamente me dijo: Srita buenas noches, pensé que no llegaba pero que bueno que ya esta aquí, no quieres pasar por un café, así se le pasará y ya se irá con más calma. Pero yo quería irme y le dije que no, al encontrar mis lllaves las saqué de mi bolsa pero en un movimiento mi bolsa cayó y mis cosas se cayeron, mi maquillaje y mis cosas salieron de la bolsa, don José empezo a recogeerlas conmigo, cuando noté un enorme bulto en su entrepierna, me quedé pasmada con el tamaño. A lo que empecé a sentir mi conchita humedecerse, tanto que habia calentado a mis compañeros y al chico de transporte que dije bueno me acabo de calentar con este viejito y después me voy con mi juguetito a mi casa, pero don José es un viejo lobo de mar y me envolvió. Cuando me voltié para tratar de abrir mi carro paré mi culito y me hice para atrás de modo de mi culito quedo junto a su verga, como "según yo no podía abrir mi coche porque la llave se atoraba" segui restregando mi culo en su tremenda estaca que tenía. Aaay srita mire nada más como me ha puesto, me dijo. Si supiera como ...

... estoy yo le dije. Pues si usted gusta podría ayudarla, ya ve que a mi me da por ayudar a las chicas hermosas como tú. Cuando por fin abrí mi coche, ya tenia a don José acariciando mis nalgas con sus manos, de modo que cuando bajo su mano para querer pasarse de listo y tratar de bajar mi tanguita le dije: Nooooo! paré por favor!!! El hizo caso omiso a mis peticiones y paso su otra mano delante de mi vientre y empezó a acariciarme bajando sus manos a mi conchita, como si quisiera meter sus manos pero sobre mi vestido que ya lo habia subido, el frío pegaba en mis piernas pero no me importaba porque don José se repegaba contra mí aprisionandome contra mi coche, yo me hacia para atrás queriendo aprisionar su tremenda cosota con mis nalgas. Aquí no!!! por favor!!! don José!!! Le decía entre jadeos, mientras me besaba el cuello y detrás de mis orejas pasando por mi nuca. Entonces el me dijo, ven vamos aquí enfrente y me jalo del brazo. Entonces cruzamos la calle y exactamente del otro lado de la calle había un porton azul, saco sus llaves y abrió la puerta, cuando pasamos me di cuenta que era como un terreno pero con bardas a su alrededor, habia solo dos coches que el reparaba y muchisimo pasto bastante crecido. Entonces me quede viendo todo alrededor pero me regreso a la realidad su manos aprisionandome otra vez contra él, recorría todo mi cuerpo de arriba abajo, de mis piernas llegando hasta mis celos que los tocaba con tanta delicadeza que me hacia querer terminar ahí de tan rico ...