La pasión por los pies - Relatos Eróticos

La pasión por los pies

LA PASIÓN POR LOS PIES

Me llamo Javier, tengo 18 años, colombiano y me encanta masturbarme a cada rato y la mayoría de las veces es pensando en los pies femeninos.

Pues mi historia comienza desde que tenia aproximadamente como 12 años cuando todos los días después de clases salía directo para la casa de unos amigos y uno de esos días encontramos en un cajón del cuarto del hermano mayor de uno de mis amigos un video porno por lo que decidimos verlo, todos andábamos contentos de que habíamos encontrado plan para la tarde que seria ver y divertirnos viendo aquella película, pero al pasar menos de cinco minutos empezó un hombre a chuparle el pie a una mujer muy guapa cabello rubio, ojos claros, delgada y unos hermosos pies con unos dedos delgados y uñas bien cuidadas por lo que a mi me pareció muy excitante, todo lo contrario de mis amigos que les pareció muy asqueroso eso de hacer cosas con los pies de una persona por lo que de inmediato se levantaron y apagaron la TV.

Yo quede con unas ganas enormes y tenia mi verga que reventaba pero no podía decir nada con respecto a la película por que a todos les pareció asqueroso mientras a mi me excito muchísimo y estaba un poco confundido por que a esa corta edad que tenia lo único que me imaginaba con el sexo era uno encima del otro y nada de eso de los pies.

Desde ese DIA empecé a fijarme en las mujeres que tenían sandalias, las que andaban con tacones y me fui dando cuenta sobre ese fetiche de los pies. Y descubrí en ...

... una prima de otra ciudad que tiene unos hermosos pies a la cual he tenido el placer de tocarlos. Y olerlos gracias a que hace dos años ella vino a saludarme y desde que la vi. Me enamore de ella y sobre todo con esos hermosos pies. Una noche mis papas y los papas de ella salieron a comer y nos dejaron solos en casa y nos pusimos a beber algunas copas y mi prima ya como a las 2:30 AM le empezaron a hacer efecto los traguitos y como habíamos bailado mucho aquella noche los dos estábamos agotados y me dijo que le dolían los pies por lo que yo no perdí mas tiempo y me lancé diciéndole que si quería yo le hacia un masaje por lo que ella accedió y se recostó en el sillón de la pieza de ella y se relajo a la que cocí un pie y empecé a hacerle un masaje fenomenal, gracias a que ella tenia unos pies divinos, yo diría que son los mas delicados y bien cuidados que nunca haya visto, bueno volviendo al tema empecé a sobarle la planta del pie y a hacerle movimientos muy delicados y relajadores a la que ella se relajo tanto que empezó a dar pequeños gemidos, ya pasando como diez minutos ella se dio cuenta de que ese masaje ya no era como para calmarle el dolor sino que ya se estaba poniendo caliente y no aguantaba mas y cuando me di cuenta ya se había soltado el pantalón y tenia su mano por encima de su sexo, yo al verla así me puse a cien y me lancé a pasar a otro nivel y empecé a olerlos, tenia un olor exquisito, un olor a sudor y a cuero de sus tacones y me lancé a darles un beso a esos ...