1. De gallegos


    Fecha: 02/11/2020, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Ya sabemos todos como se las gastan (nos las gastamos) los gallegos. Cuando uno (otro) va, ellos (nosotros) ya están (estamos) de vueltas. Y preguntarles (preguntarnos) algo es salir trasquilado, pues te contestarán (contestaremos) con otra pregunta.
    
    Es como en la verbena, allá por el "patrón"… Suena la orquesta. Y llegan las "lentas". Un grupo de "rapaces" anda al acecho de alguna que otra "moza". Uno de los decididos se acerca a la más majeta, y requiere su atención:
    
    - (Solícito y amable) ¿Bailas?
    
    - (Esquiva y rotunda) ¡No!
    
    - (Asombrado) ¿Y luego? (Expresión típica gallega que viene a sustituir al ¿por qué?)
    
    - (Más rotunda) ¡Y luego tampoco!.
    
    (Reproduzco el diálogo en gallego, pues tiene más "chicha") :
    
    -¿Bailas?
    
    -¡Non!
    
    -¿E logo?
    
    -¡E logo tampoco!
    
    Pues eso. ¡¡¡Gallegos!!!
    
    Pero ya que estamos, contaré un hecho verídico que acaeció en un juicio allá por los años setenta y que me fue relatado por el abogado de una de las partes. Lo rememoro ahora (las contestaciones, por mantener su "aquel", en gallego –que se entiende tan ricamente):
    
    Se llama a un testigo a declarar y se procede a preguntarle por sus posibles relaciones con el acusado: conocimiento, amistad, relaciones familiares.
    
    - ¿Conoce Vd. al acusado, fulanito de tal y tal, aquí presente? – pregunta el abogado, con tono mesurado y estudiadamente cortés, a su testigo
    
    - ¿Qué si o coñezco? Claro que o coñezco... ¡de sempre!. Somos veciños. Dende pequenos xa vivíamos porta con ...
    ... porta. –contesta el testigo, paisano rudo y curtido, con voz decidida y formas campechanas y entusiastas (que lo vive, vamos)
    
    - ¿Le une alguna relación de amistad con el susodicho fulanito de tal y de tal? – el abogado continúa con el mismo tono monótono y correcto
    
    - Home, ¡que lle vou a decir!. Fuimos xuntos na escola, fixemos a mili xuntos, máis de unha novia compartimos… pois claro que somos amigos. Moito. – el testigo parece sentirse a gusto, y resuelto.
    
    - Y ¿guarda con él alguna relación de parentesco? – El letrado mantiene el tono del interrogatorio
    
    Aquí queda el testigo mudo un rato... Se lo piensa detenidamente y dice, dubitativo
    
    - ¡Pois, a verdade, eu non sei!
    
    Extrañado, interviene el juez y pregunta:
    
    - Vamos a ver, ¿cómo que no sabe? ¿Vd. no ha expresado claramente que conoce al imputado desde la infancia?
    
    - Sí, eso dixen. O coñezco dende sempre - Rotundo el testigo
    
    - Y ¿no es más verdad que ha manifestado que son vecinos desde entonces? –continúa el Juez
    
    - ¡Xa che digo!. ¡Sempre hemos vivido na mesma casa, porta con porta! – Cada vez más decidido en sus manifestaciones
    
    - Y nos indica Vd. que son amigos. – El juez está claramente sorprendido
    
    - Moito, Certo é. - preciso
    
    - Pues me dirá Vd. si conociéndolo de toda la vida, siendo vecinos desde siempre y profesándose una gran amistad ¡¡¿cómo es posible que no sepa si les une algún lazo familiar?!! - visiblemente contrariado, el juez no puede contener la exclamación muestra de su ...
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