Mi cuñada, sabor de mujer
Fecha: 05/11/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: DanteHN, Fuente: CuentoRelatos
... cada centímetro de piel que afloraba a la luz, así no desaprovechaba nada y cada centímetro de su piel se guardaba en mi mente y en mi sentido del gusto, fui quitando todo hasta llegar a sus pechos que desde que los descubrí los disfrute al máximo, pase mi lengua primero, luego los chupe como si los tuviera solo por un pequeño instante, los acaricie con mis manos mientras los observaba fijamente con mi mirada para tratar de no olvidarlos nunca, ella se quitó el pantalón y yo quite de ella su ropa interior mientras besaba su cuerpo, deslice mi mano hasta colocarlo directamente en su clítoris y empecé a masajear despacio pero con firmeza y cuando sentí su humedad metí dos de mis dedos dentro de ella mientras de ella salían expulsados unos pequeños gemidos que me calentaban cada vez más, tenía mi pene como volcán casi a punto de estallar y baje mi legua hasta su clítoris y comencé a raspar mi legua mientras sentía en mi boca el sabor de sus jugos, el sabor a mujer y yo disfrutaba ese sabor. Cuanto más lamia su clítoris y saboreaba sus fluidos sentía como su piel se ruborizaba y su cuerpo se movía al son de mis lamidos, tocaba sus piernas con las palmas de mis manos muy despacio para poder disfrutar de toda su piel y de todo su cuerpo, su piel una delicia, se erizaba mientras lamia de su sexo, la bese muy suavemente desde sus piernas hasta llegar a sus ...
... pecho. Sus pechos son una delicia, son pechos un poco grandes y suaves, me los quería comer, pero también quería que ese momento perdurara mucho más, así que los lamí, los bese y los chupe lo más despacio (aunque quería hacerlo de manera salvaje) posible para no olvidarlos y no perderme de nada, conocer hasta el más pequeño detalle, podía ser la última y única vez, así que me tome el tiempo suficiente para hacer con ellos los que yo quisiera, luego baje de nuevo para sentir el rico sabor de su sexo, sentir el sabor de esa mujer que había deseado por mucho tiempo. Pasamos un tiempo en eso que sin pensarlo ya el tiempo se nos terminaba, pero yo no quería penetrarla con tan poco tiempo, porque quería que al penetrarla fuera algo pleno, lleno de placer y por poco tiempo, así que le pregunte que si podía pasar mi pene entre sus pechos haciendo un RUSO y me contesto que no había problemas, claro que yo estaba casi a punto que empecé a pasarlo por sus pecho hasta que termine sobre sus deliciosos pechos, el semen fue abundante, pero lo mejor fue cuando ella tomo con su mano mi pene y empezó a manipularlo como para sacar lo que aún quedaba y cayera sobre sus pechos, fue tan placentero ver ese momento, como sus pechos estaban llenos de mi semen. Nos aseamos y vestimos, luego la acompañe hasta su casa. Quedamos de vernos otro día, pero esa será otra historia.