JE mi amante preferido... Segundo encuentro - Relatos Eróticos

JE mi amante preferido... Segundo encuentro

... sobre él, pero lo hice dándole la espalda a su cara. Me clavé su guevo y allí comencé a menearme, uf que rico, sentir todo ese guevo dentro de mí, estando yo arriba, mi cuca tragona si lo podía tener completo metido, JE tenía miedo por mis movimientos y mi embarazo, pero de verdad yo ni me acordaba de la barriga y me daba de lo más rico, dándome duro y lo más profundo que podía. En eso veo un flash y veo que JE me toma unas fotos, y me quedo quieta para que capture el momento, y así comenzó a meterme un dedo por el culo y yo quietecita, dejó el celular a un lado y seguimos cogiéndonos. Al rato me pidió que me pusiera de frente y así lo hice, me senté aun con su guevo dentro de mí y me fui girando, quedando de frente sin sacarme su guevo. Allí comencé a moverme dándole giros a mi cintura y restregando toda mi cuca en la base de su guevo, me levantaba un poco y JE desde abajo se movía rápido hacia arriba, metiendo y sacando ese guevo y haciendo ese sonido de nuestros sexos cuando chocan y de estar mojados, que rico esos gemidos de JE y míos como se mezclaban.

En eso JE me agarra por cada nalga con sus manos y me hace sentarme y quedando completamente clavada y comienza a abrirme las nalgas y a acariciar mi entradita del ano. Diooss me dio un corrientaso de morbo, porque aunque no tenía experiencia en el sexo anal y solo lo vivido con JE en el primer encuentro, yo sabía que JE iba a querer darme por el culo, así que yo fui preparada y dejando que JE jugara con mi culo sin ...

... bajarme sobre él, me estiré a agarrar mi cartera y saque un frasquito de aceitemenems que llevé y se lo entregué en las manos y le dije “ve que se te ocurre hacer con eso”, y me dijo “que maldita puta eres MF pero me encantas” y esto será para abrir ese culo mío. Así me comenzó a echar aceite entre las nalgas, mientras seguía bien clavada con su guevo y así me fue metiendo un dedo por el culo, me dolía, pero me gustaba y lo dejaba hacerme, así metió hasta dos dedos. Al rato me dijo “vamos a la orilla de la cama así yo sentado y tu sentándote sobre mí, podrás controlar la penetración en tu culo y si te duele puedes levantarte”. Así lo hicimos, él se sentó en la cama, yo parada dándole la espalda, se echó aceite en el guevo y lo apunto a mi culo y me fui bajando, me entraba algo y aguantaba y allí hacia los movimientos de entrar y salir, era doloroso, pero soportable. JÉ me animaba y allí seguía, pero por no poder clavármelo todo y sentarme sobre él, yo me cansaba por mantener la postura, me paraba, descansaba y lo volvía a intentar, en esa que lo tenía en mi culo, bajé rápido y se movió el guevo y entró por mi cuca dándome un placer inmenso y me iba a levantar para seguir clavándome por el culo, pero JE me dijo que siguiera por la cuca para relajarnos, y me agarró por las caderas y me ayudaba a bajar y a subir.

Yo mientras frente a mi tenía la cortina de una ventana que daba al frente de la habitación y por donde pasaban los carros que iban saliendo del hotel, yo me veía sólo ...