La novia de mi compañero de piso
Fecha: 21/11/2020,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: MIKE25, Fuente: CuentoRelatos
Apuraba mi última semana de curso en mi típico piso de estudiante, después de realizar todos los exámenes me quedaba unos días de libertad antes de regresar al hogar familiar.
Durante esa última semana mi compañero de piso se trajo a su chica al piso; una mala idea ya que a él le quedaba un examen por hacer el viernes y la chica paso toda la semana bastante aburrida, o tal vez no??
Estaba todo pensado, sabía que mi compañero tenía el examen el viernes por la mañana y que no volvería hasta bien tarde, tal vez hasta depuse de comer, por eso el jueves por la noche prepare de nuevo "mi elixir" para ponerlo en funcionamiento al día siguiente en el desayuno...
Me levante justo después de que mi compañero marchara al examen y al rato se levantó su chica.
-Bueno días! Y este? (refiriéndose a su chico)
-Se marchó ya, quería dar el último repaso en la universidad. ¿Te preparo algo para desayunar?
-Sí, gracias! Mientras voy a preparar la bañera para relajarme.
La pobrecita o por qué no decirlo, la agraciada (por lo que sentiría poco después) no se esperaba que en el desayuno iría cierto "complejo vitamínico" que le cargaría las pilas como ningún otro.
Desayunamos juntos sin mantener una conversación muy particular, pero yo sabía que en poco instantes mi "complemento" surtiría efecto y no podría resistirse...!
Recogimos y yo me fui a mi habitación sabiendo que aquello daría resultado; al poco entró ella en mi habitación... solamente con una minúscula toalla ...
... alrededor de su cuerpo desnudo, con su melenita suelta; en aquel momento me quede un poco perplejo de ver semejante escultura entrando a mi habitación.
-perdona, es que tengo problemas con el termo del agua y sale fría, que debo hacer?
-Mi traducción simultánea fue:
-perdona, pero me encuentro con un calentón de 1.000 demonios y mi novio no está, me quitas tu este calor o tengo que darme una ducha fría?
Entonces me levante del escritorio y me dispuse junto a ella a ver qué problema tenía, aun sabiendo lo que buscaba, aunque ella no supiera en que podría terminar todo aquello.
Una vez frente al termo del agua, ella delante de mí intentaba arrancarlo y al inclinarse sobre él la pequeña toalla se subía y dejaba parcialmente al descubierto su espectacular y bien formado trasero del cual yo no quitaba la vista mientras ella insistía en los problemas del termo...
-¿Has mirado si el paso de la bombona de gas está abierto? Tal vez sea ese el problema!
-Uy! Pero que estúpida soy no me había dado cuenta de eso!!!
Se giró hacía la bombona, se agacho de forma bien descarada para comprobar el paso de gas, sabiendo que la minúscula toalla dejaría al descubierto sus encantos, pero, sucumbiría yo a ellos?
Sin pensarlo impregne un par de dedos con algo de saliva y palme con firmeza su ansioso y calenturiento conejo mientras le decía:
-Pues tu pareces estar bien calentita por esta parte! Seguro que necesitas agua caliente?
Entonces ella sin dejar de estar volcada ...