Mi cuñada - Relatos Eróticos

Mi cuñada

Todo comenzó un día que vi salir a mi cuñada del baño. Llevaba una pequeña toalla ajustada, sujeta a su cuerpo lo cual noté su culo muy lindo, caminaba por el pasillo y logré ver que llevaba una pequeña tanga bien metida es ese trasero. Ese día no pasó nada, pero empecé a desearla cada vez más y más.

Un día en la madrugada salí al baño, empecé a oír unos pequeños quejidos, era mi cuñada, mi hermano estaba atendiéndola como todo ser humano. Esto me excitó mucho pues me hice una paja en ese momento. Después logré tener su número telefónico y empezamos a mensajear, pues en broma y broma le decía que me dejara dormir con ella, solo le daba risa.

Total, para no estar en tantos detalles le dije que quería follar con ella, quería sentir esas bubis tan linda y ese culito serio mío. Al principio solo decía que no, pero después empecé a notar que si quería pues me platicaba de todo lo que le pasaba cuando mi hermano se la cogía.

Me excitaba mucho, lo cual le dije de una vez que cogiéramos. Ella aceptó, solo que sería solo algunos caldos, pues mi hermano se tenía que ir al trabajo y por las noches le mandaba mensajes que quería un caldo.

Pero no quería porque estaban mis padres y se animó... en la casa, pero su recámara estaba arriba de mi recámara, tenía que subir las escaleras. Total, subía y ella ya me estaba esperando en su cuarto, pues solo me la caldeaba, pero sentir esas bubis tan lindas y bien duras, su pezón ummm muy rico. Pues después le metía mano en su rajita, ...

... ella gemía de placer pues quedaba mojadita. Solo pasó eso por unos meses.

Hasta que un día me pidió que cogiéramos, pues la condición era que quería ver mi pene. Solo le mandaba fotos de mi pene bien erecto, cuando se la mandé ufff, se sorprendió y me dijo —ummm se ve delicioso, está muy muy grande, más que el de tu hermano. La verdad esta pequeño pues solo mide 18x5cm, pero ella me decía —ummm seguro que si me entrara… —le respondí —pues claro… en tu culito bien abierto en 4, claro que si te entra. Pues se excitó y me dijo —vale, solo porque eres mi cuñado y quiero probar esa pija que te cargas.

Así pasaron algunos meses esperando la oportunidad, hasta que un día mi hermano tenía que salir al trabajo muy temprano, se tenía que quedar sola, mis padres no estaban en la casa, pero no me importó. Le llamé por celular y le dije —ahora si vamos a coger. No quería pues temía que nos escucharan, total que aceptó... —¿y a dónde cogemos? Le dije que en su recámara y aceptó. No tardé mucho en subir las escaleras pues mi pene la deseaba mucho

Cuando subí, ella ya estaba cambiada con una tanguita color negra y un brasier, lo cual dejaba ver sus lindos encantos... No perdimos tiempo y nos besamos, ella empezó a tomar mi pene sin sacarlo de mi bóxer. Cuando se agacha y de momento baja mi bóxer muy despacio y al bajar sale mi pene bien erecto y abrió sus ojos y me dijo —ummm ummm wuaaa, sí que esta grande —y empezó a chuparla. Pues lo hace muy bien una chupadotas que casi hace que me ...