MI SOBRINA DESDE LOS CINCO 3 - Relatos Eróticos

MI SOBRINA DESDE LOS CINCO 3

... blanco y al igual que su culo de tanto mete y saca de la punta, empecé a presionar mas y empezó a entrar mas. Cada que le entraba un pedazo de mi verga decía ahhhhh!!!! Aaaaaaaaaaahhhhh!!! Y yo le decía, quieres que pare? Y movia su cabeza diciendo que no. De repente me salía de ella y le mamaba y luego volvia a entrar. Cuando iba a la mitad, le di el empujon final y se la meti toda. Pensé que iba a llorar pero solo abrió mucho sus ojos y no dijo nada. Vi como le salía un poco de sangre y me quedé quieto un momento. De repente cerró sus ojos y me dijo sigue tío por favor!!!! Y empece a bombearla primero despacio, pues no era tan fácil, sentía mi verga super apretada y que iba a reventar!!!!! Le seguí limando y ella empezó a gemir mas que alguna puta que me hubiera cogido antes. De repente sentí que iba a terminar y puse sus piernas en mis hombros y la limé con mas fuerza mientras le decía que puta eres!!!! Por fin eres mí zorra!!!! Y ella tenía su boquita entre abierta y me super excitaba ver su carita que ponía. Cuando terminé la llene con toda mi leche y ella tenía ya sus ojos en blanco. Despúes ...

... me separé de ella y nos acostamos un momento a descansar. Ella no decía nada y eso me preocupó y entonces le dije, que tienes? Y me dijo nada, es que me siento rara. Le dije porque? Y me dijo es que sentir tu palo adentro de panochita fue tan delicioso que parece un sueño. Siempre voy a ser tu mujer verdad? Le dije si mi amor, siempre y me dice aunque crezca y le dije ah caray como? Si porque si crezco te puedes buscar a otra niña como yo cuando era chiquita. Le dije no mi amor, aunque tenga varias mujeres yo siempre te voy a querer. Entonces me abrazo y le dije vamos a bañarnos. Ahí la limpie muy bien. Su panochita estaba irritada por la cojida. Nos salimos del baño y nos fuimos a acostar. Despues de un rato que descansamos se me volvió a subir y me paró la verga y ella solita se la acomodó en su panochita y se empezó a mover de nuevo. Estuvimos toda la tarde cogiendo riquismo y de ahí seguimos cogiendo mucho tiempo por los dos lados. Nunca nos vio nadie. Me la seguí cogiendo hasta los doce o trece años. Despues les cuanto mas formas de como me la tiraba y los riesgos que a veces corríamos por coger.