Marielena y Doña Elvira
Fecha: 22/10/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: suchabitch, Fuente: CuentoRelatos
Marialena se encuentra de vacaciones en lo de su tía y le encanta tomar sol en el jardín, donde se siente a salvo de miradas indiscretas. No sabe que su vecina Doña Elvira la observa con ojos lujuriosos. Desde la llegada de su vecinita, Doña Elvira se dio cuenta que la nena es un bombón, que tiene un físico esbelto. Pelo largo castaño y unas piernas y una cola de ensueño. Esa tarde mientras la miraba desde un lugar que Mariaelena no la podía ver casi se desmaya cuando vio que la chica se desprendió la parte superior del bikini y dejo en libertad sus pechos. A doña Elvira se le lleno la boca de saliva mientras veía esas dos preciosas montañitas de carne blanca con pequeños pezones y su mente calenturienta solo pensaba en mamárselos.
A doña Elvira siempre le habían gustado las chicas, pero a sus 65 años no tenía muchas ocasiones de tener sexo con alguna de esas preciosuras que pasaban rumbo a la playa y solo podía mirarlas con deseo. Esa tarde excitada por la vista de esa preciosura no se pudo contener y salió al jardín contiguo donde se acercó al muro y dijo "Hola, hola soy tu vecina". Marialena sorprendida se asustó y al sentir la voz de esa desconocida solo atino a cubrirse sus pechos con la remerita que tenía a su lado. Se levantó y se quedó mirando a esa extraña que decía que era su vecina.
Doña Elvira le dijo "No quise asustarte, me llamo Doña Elvira y vivo aquí al lado". La chica, un poco más tranquila le dijo "Yo soy la sobrina de doña Sofía" y se acercó hasta ...
... el murito para saludar a su vecina. La vieja no podía creer tener a esa preciosura adelante de ella tapándose los senos con su remerita y le pregunto "Como te llamas preciosa" "Marialena, y estoy unos días por las vacaciones”. "Mira, justo estaba por tomar algo fresco, porque no venís y charlamos en casa” le dijo la vieja tratando de ocultar su excitación. Marialena le contesto “Bueno, mi tía no llega hasta la noche así que me voy a poner algo de ropa y voy a su casa". A esta altura, la chica se dio cuenta como la miraba la vieja, sobre todo las piernas y trataba de verle los pechos que apenas podía tapar y sintió algo raro. Que un chico o un viejo la miraran así no le extrañaba pero que una mujer mayor como esa la mirara con ganas de comérsela le extrañaba y a la vez la intrigaba. “No te cambies, si así estas cómoda, solo vamos a charlar un rato" le dijo la caliente vieja que ya estaba impaciente por llevarse ese bombón a su casa.
Marialena acepto y se puso la remerita lo que permitió a la vieja ver sus pechos por un instante lo que la enloqueció y pensaba que una vez que la tuviera en la casa le iba a hacer de todo. “Pasa por acá que hay lugar" le indico la vieja y la chica paso por un costado del murito lo que le permitió a la vieja apreciar los muslos y nalgas de la chica que usaba una tanguita minúscula. "Vení, linda" y la agarro de un abrazo guiándola a la casa. Una vez adentro, doña Elvira la invito a sentarse en el living mientras le preguntaba "que querés tomar, ...