EL INTERNADO (28) Chupada de Pollas en la Feria
Fecha: 04/01/2021,
Categorías:
Intercambios
Autor: ZLASKO, Fuente: SexoSinTabues
EL INTERNADO (28) Chupada de Pollas en la Feria El compañero de mi hermano, Angel Camona, tiene el cuerpo fibroso, y la piel morena. Muy guapo de cara, super morbosa de tío malote, y con un semblante muy varonil. Los ojos grandes y azules, el pelo rapado a lo militar como mi hermano, y es super parecido al actor gay "Ken Rodeo". Tiene un culo estupendo, que se le marca muy prieto en los pantalones, y me calienta la polla con solo mirárselo. Y no te digo nada de su polla, 22 cm de carne gorda y dura como una piedra, con un capullo granate que te quita el hipo, y unos huevazos grandes y peludos. Según me dijo Luis tiene 21 años, y antes de entrar en la academis militar había estado en un reformatorío unos años, pero que no le había contado por que fué. Entré muy despacito y en silencio en el dormitorío donde dormía el cabo Carmona. Estaba dormido profundamente, espatarrado a todo lo ancho de la cama, y roncando como un poseso. Quería verle el paquetón de mis fantasías, mirarle las dimensiones de su polla marcada en el calzoncillo militar, y acercar mi nariz para oler la tela que cubría aquél miembro. El cabrón estaría follando en sueños, por que tenía la polla super empalmada, y dura como el acero, y se le salía la cabeza por el elástico de arriba. Durante un rato me quedé parado, arrodillado, con la cara muy cerca de aquél maravilloso bulto, admirando la cabezota gorda de su pollón, y olfateando el delicioso olor a macho que desprendía. ¡Que aroma más rico! . De buena gana me ...
... hubiera metido su polla en la boca, y se la hubiera mamado hasta cansarme, . y no os miento, es la pura verdad. Pero Luis me sacó del dormitorio casi arrastras y me ordenó que terminara de arreglarme, y que él se encargaría de despertar a su colega. Después de despertarlo, nada interesante que contar, solo se duchó y se puso el uniforme militar de faena como mi hermano. Antes de salir nos fumamos un par de porros para ir a tono, y nos bebimos unas cervezas bien frías, las cuales ya me había encargado yo, de echarles un éxtasis de regalo. Cuando llegamos a la plaza del pueblo, estaba abarrotada de gente, no cabía ni un alfiler, y el sonido de la música era ensordecedor. Después de pasearnos un rato por la feria, decidimos meternos en la caseta de la juventud y beber una copas escuchando la banda de Rock que actuaba. Allí nos cargamos por lo menos tres birras y dos cubatas de ron cada uno, y unos cuantos porros en la parte de atrás, donde estaban los servicios. Había un grupito de niñatas que estuvieron tonteando con nosotros y calentándonos la polla. Sobre todo dos de ellas, que cada vez que nos fumabamos un porro, se pegaban a nosotros como lapas para que se lo pasaramos, y de paso pegarnos un buen refregón en la bragueta, como el que no quiere la cosa. La verdad es que no me hubíera importado, ver a Carmona follándose el coño de una de las niñatas, a esas alturas ya estaba cachondo y muy caliente, . y yo no era el único, por que mi hermano y su colega estaban que se salian. ...