GIANT PASSIONS - Relatos Eróticos

GIANT PASSIONS

... su dedo, Rossy mueve al minúsculo miembro en su interior acariciando suavemente su clítoris. Como dije anteriormente, a Kim le gustan todas las fantasías relacionadas con su portentoso culo, el cual es casi perfectamente redondo, de piel suave, firme y musculoso. Tiene un especial apetito por introducir a sus clientes en su ano y dejarlos ahí por muchos minutos, mientras ella experimenta varios orgasmos rectales. A veces los mueve en forma circular acariciando suavemente las paredes de su intestino y otras veces los saca y mete rápidamente hasta venirse. Aunque no es tan violenta como Nelly, Kim se deleita comprimiendo a sus clientes dentro de su recto hasta casi aplastarlos, también los obliga a besar y lamer su orificio, así como apretujarlos entre sus hermosas nalgas y sentarse encima de ellos. También cubre a sus clientes con un lubricante especial y los introduce profundamente en su interior para después con gran placer defecarlos. Los clientes, que como yo gustan de este tipo de servicios, terminan completamente empapados en sus fluidos rectales y lubricante aceitoso. A veces me ha introducido y defecado una y otra vez, siempre alcanzando el orgasmo al ser expulsado mi diminuto y maltrecho cuerpo de su apretado orificio posterior. En otras ocasiones, abriendo con una mano sus nalgas coloca la cara del cliente directamente contra la superficie de su rugoso esfínter empujándola con un dedo y obligándolo a olerlo por muchos minutos. Después también le ordena que lo bese, ...

... acaricie y lama, a veces unta su ano con chocolate o caramelo y disfruta grandemente sintiendo una diminuta lengua explorando cada una de las grietas de su hoyito. Cuando baila para los demás clientes, generalmente tiene insertado a un diminuto ser en su recto, pero de tal forma que solo su cabeza es visible entre los pliegues de su esfínter. Al bailar separa sus nalgas y agachándose muestra a los demás miembros al diminuto ser atrapado en su recto. Después mueve las caderas de tal forma que sus nalgas se separan y cierran rítmicamente ocultando y exponiendo a su cliente, atrapado sin misericordia. Cuando un cliente le pide que se siente sobre él, lo coloca sobre una silla especial y volteándose, abre de par en par sus nalgas de tal forma que al sentarse sobre el diminuto ser, éste queda profundamente atrapado entre sus nalgas. Entonces, empieza a mover el culo en forma circular o bien dando pequeños sentones sobre el asiento, aplastando y sofocando al minúsculo ser hasta dejarlo exhausto, comprimido y cubierto de su sudor. Sus clientes más radicales son usados también como papel higiénico. Todavía recuerdo como fue que conocí este exclusivo club. Me encontraba un día en mi trabajo navegando por internet cuando Larry, mi supervisor, me sorprendió revisando una página japonesa de gigantismo. Me preguntó que es lo que estaba haciendo, y yo solo pude balbucear una respuesta incoherente mientras trataba de salirme de la red: “No, no estoy haciendo nada” dije “Vaya Vaya, parece que ...