Oficina de atención a la mujer necesitada
Fecha: 31/01/2021,
Categorías:
Bisexuales
Autor: Debross_extremo, Fuente: CuentoRelatos
... coño al aire para que fuese evidente pero ese día solo logre un polvo de menos de cinco minutos y un “estoy muy cansado “ahí fue que comencé a pensar que algo estaba mal”.
Ella pensó que algo estaba mal, pues yo estaba convencido solo con escuchar la historia estaba a mil y sentía que el líquido pre seminal empapaba mi bóxer pero aún la plática estaba lejos de acabar.
“El punto que colmó la copa, continuó, fue el día de su cumpleaños me vestí lo más provocativa que pude, recuerdo que fuimos a cenar fuera y en el restaurante me dirigí al baño y tomé fotos de mi trasero en el que tenía insertado una joya anal con su nombre tallado sobre la piedra roja que la coronaba al regresar a la mesa deslicé el teléfono hacia el que lo observó como si de cualquier cosa se tratara y no mencionó ni media palabra solo al llegar al estacionamiento me empujó contra el capó del auto y me la metió salvajemente, cuando le reclamé por aquello que me dolía, que porque tanta rudeza, que en casa lo haríamos mejor, el muy capullo se hizo el molesto se guardó la polla y ni una palabra más en toda la noche. Es increíble, me decía, cuántos hombres buscan putas para follar por el culo porque sus mujeres no quieren hacerlo por ahí y este simplemente decide no hacerlo; a que hombre no le gusta follarse un buen culo, se preguntó con indignación”. Ni que lo digas yo tenía una erección descomunal que de no ser por tener las piernas cruzadas se habría visto desde un avión. De no conocer bien a mi padre ...
... hubiera jurado que era gay pero algo me decía que se estaba follando a alguna zorra que lo dejaba exhausto y ya tenía idea de quien podría ser.
Aún con los ojos llenos de lágrimas se abalanzó sobre mi hombro a llorar, intentando consolarla le di un fuerte abrazo para que se sintiera arropada pero más que eso le apoyé por completo mi verga dura sobre su vientre, algo que debió haber sentido aunque no dio nada, mientras le pasaba la mano por la espalda casi hasta llegar a su culo y le susurre al oído, “no te preocupes esto pasará y yo te ayudare a buscar una solución”. Ella al escuchar esto me apretó con más fuerza aun y deslicé mi mano hasta donde comienzan las nalgas y descubrí que aun vestía sin ropa interior.
Al llegar a mi cuarto aún estaba anonadado por lo ocurrido calme mi calentura con una paja monumental. Es curioso nunca antes había prestado atención a la sexualidad de Luisa, siempre me pareció muy recatada y un tanto mayor para mi papa pero vaya que era guarra aquella cincuentona. Seguí reflexionando sobre el tema pero aparecían imágenes en mi mente que daban vida a aquella historia. Al principio sentí un poco de lastima por ella por lo que investigue un poco y fue fácil comprobar el problema, el pillo de mi padre se estaba follando a Maira la hija de Luisa, esa perra, ahí entendí porque dejo de escabullirse por las noches a mamarme la verga que siempre me dejaba con ganas de más. Aquello me indignó no podía concebir que se la estuviera follando antes que yo, ...