un vuelo regular - Relatos Eróticos

un vuelo regular

Estoy embarcando en el avión que me llevará a Roma, apenas hace un par de horas que te dejé en la cama, después de una noche bastante animada. Te envío un whatsapp de despedida y justo cuando embarco recibo un video tuyo, intentando que nadie a mi alrededor lo vea visualizo en él cómo te masturbas hasta correrte con toda clase de gemidos y aullidos. Esto hace que me ponga frenético, pero tengo que dirigirme a mi asiento.Despegamos, con una erección que me m*****a dentro de los pantalones, en cuanto se apaga la señal de cinturones, me voy al baño del avión, con el teléfono en la mano y una clara intención en mi cabeza.... follarte durante todo el vuelo.Acabamos de despegar, me encierro, me pongo los auriculares y cierro los ojos, pongo tus gemidos de fondo, te veo en mi mente delante de mi, con el vestido remangado hasta la cintura, las braguitas enrolladas en las rodillas, y una mano metida por el escote.En dos meneos la tengo completamente tiesa, abro los ojos, la mano que me está masturbado es la tuya, el vestido desabrochado, inclinada hacia delante, tus pechos bailan libremente al compás de tu mano, el culo apoyado con fuerza contra la puerta y tu otra mano ahora entre las piernas. Me tenso todavía más con la visión, noto el aliento de tus gemidos en mi cara, aspiro tu excitación.Me miras con la cara descompuesta y preguntas-Te gusta esta visión?Te contesto con voz entrecortada-Me encanta, sólo podría mejorar con un espejo en la puerta para no perder ni un detalle de tu ...

... cuerpo, ahora entiendo el porque de las habitaciones llenas de espejos en los moteles y hoteles para parejas.Gimes más fuerte, aprisionas con fuerza mi polla hasta casi estrangularla, te paralizas un instante, no respiras. No te mueves. Y tras un instante que parece eterno suspiras y aflojas la tensión, tus ojos brillan de satisfacción, acercas tu mano empapada por tu corrida a mi boca, llamo todo el líquido, chupo los dedos como si fuese tu clítoris, hasta que sólo queda mi saliva en tu mano, sigues con el lento meneo de mi polla, te agachas un poco y depositas saliva en la punta para poder acariciarla más suavemente con la mano, tiras de mi camiseta hacia arriba y diriges tu mano hacia mi pecho, besas y mordisqueas mis pezones haciendo que intenten competir en dureza con los tuyos, me vuelvo a tensar, vuelvo a abrir los ojos y sigues ahí, un chorro de líquido brillante se va deslizando por el interior de tus muslos, ya casi la altura de las braguitas que siguen en tus rodillas.Cierro de nuevo los ojos en una lenta y agradable agonía. Tu mano acaricia ahora mis testículos y se insinúa hacia el periné.Bajas poco a poco desde mi pecho haciendo un camino húmedo hasta el pubis, noto ahora tu aliento sobre la punta de la polla, con cada respiración el aire hace que me llegue un estímulo frío, notas mi reacción y comienzas a darme pequeños soplidos como si quisieras apagar una vela, pero todavía se enciende más.Rodeas la punta con tus labios y juegas con la lengua en el frenillo, ...