Mi primera vez con una china
Fecha: 30/10/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... aguanté y se lo empecé a chupar de nuevo, Hiu mordía las almohada, gemía, parecía que estaba llorando, me acomodé contra su culo, veía su ojete que estaba abierto ya, le acomodé la pija y se la empecé a meter entre quejidos y gemidos, hasta que su culo quedó pegado a mi cuerpo, solo la escuchaba gemir mientras movía su culo en círculos con toda mi pija dentro, ella acompañaba con quejidos a mi pija cuando le entraba y le salía de su ojete, no decía que le dolía, simplemente se quejaba, le saco la pija del culo y le veo su ojete abierto, bien abierto y redondo, y se la volví a meter haciendo que Hiu se queje y gima de nuevo. La hago poner boca arriba, y se la meto por la concha de nuevo, "no, a Hiu gusta mucho polla en el culo", me dijo, sin dejar de mover su cintura, yo la miré y sin decir nada le levanté bien sus piernas y le volví a meter la pija en el culo, haciendo que gima mientras yo la seguía cogiendo por el culo, me metí uno de sus pies en la boca, y mientras le lamía los dedos de sus pies, pasaba mi dedo por su clítoris, que estaba como hinchado, ella levantaba su ...
... cuerpo, dando gemidos y gritos de placer a medida que le acariciaba la concha y mi pija entraba y salía de su ojete, hasta que en un momento dado empezó a hacer un gemido muy raro, como no solo si estuviera llorando, "heeeeeeee, heeeeeeeee", decía fuerte, fruncía toda la cara, yo no sabía que se estaba acabando, que estaba teniendo un orgasmo, "ahora tú, ahora tú, corre tu leche en mi culo", me decía, que apenas le entendía. Le empecé a coger el culo mas fuerte, parecía que se estaba tirando pedos a medida que le entraba y le salía mi pija de su ojete, ella pasaba los dedos de sus pies por mi cara, gimiendo como si llorara, hasta que no pude mas y metiendo mi pija bien adentro del culo de Hiu, me empecé a acabar, sentía los chorros de leche como salían fuerte de mi pija llenando el culo de esa pequeña, delgadísima mujer china, pero que la verdad me daba envidia de su marido, una mujer complaciente, sensual, una mujer que estoy seguro atraería a cualquier hombre a su lado, pero solo la tuve un rato en mi cama, disfrutamos de lo que hicimos y espero que esto se repita alguna vez.