Mis tres hermanas: Astrid - Relatos Eróticos

Mis tres hermanas: Astrid

... sal para que te vea. asrid salio con la cara roja parecia tomate ya que sus ojos color miel y su piel blanca no le ayudaban en nada. observe su cuerpo sus abdominales un poco marcados y un vientre plano delicioso parecia que estaba viedo una modelo de ropa interior femenina estaba tan absorto en su cuerpo que tube una ereccion y no me detube siquiera a taparla. estaba ella hermosa de pies a cabeza descalza viendo sus torneadas y gruesas piernas producto del voleibol y rematandola con sus maravilloso culo ella se daba vueltas y vueltas y admiraba en el espejo Astrid; no te preguntare como me veo por que se ve que te pusiste muy contento. yo: lo lamento, pero no puedo creer lo que veo. nunca te habia visto en tanga es perfecta para ti todo tu cuepo. es tan. y depronto lo senti, un calido beso y sus labios rodeando mi cuello. yo estaba en blanco. Astrid me habia robado un beso y yo solo atine a corresponderlo y rodearla con mis brasos en su cintura Astrid; te tardaste mucho, pense que no queras que te besara. Yo; callate enana me tomaste por sorpresa Astrid: te gusto? yo; claro que si, digo, tengo un mastil aqui abajo por tu culpa ella sin soltarme del cuello comenzo a besarme ella en puntitas alcanzando y lamiendo cada parte de mi cuello bajando por mi oreja y bjando lentamente a mi pecho. Yo; astrid estas segura de querrer continuar? sabes que no tenemos mucho tiempo no? aparte soy tu hermano Astrid: callate y cojeme de una ves. estube esperando que lo hicieras desde hace años ...

... no te dejare ir, ahora eres mio, y no escaparas. Esas palabras encendieron algo en mi. me volvio loco, le di la vuelta y la recoste en la cama, besandola con pasion, mientras nuestras lenguas bailaban dentro de la pista de su boca comense a lamer su cuello y hacerla gemir y con mis manos recorrer todo su cuerpo y disfrutar a mi pequeña bebe. Astrid; ah ah ah jorge porfavor,, metela. - dijo ella casi suplicando mi verga cuando ella luchaba por quitar mi cinturon en un intento fallido. yo: lo siento astrid, aqui yo mando y haras lo que yo te diga. - en un tono dominante lo respondi y ella con una mirada complice y una sonrisa pervertida acintio con su cabeza. Con un audaz y diestro movimiento quite su bra y vi po rprimera ves lo pechos de mi hermosa bebe. eren grandes unos pechos normales pero muy firmes y un pezon pequeño y rosado muy firme y duro respingon por asi decirlo. como un demente y enfermo lamia cada parte de eso pechos chupaba y lamia cada parte de su pecho y fui bajando mas por su mojada vagina cuando solo escuchaba a Astrid gemir y pedir que la saciara. algo que nunca me esperaba era esa parte que tenia ella ahi abajo,. unos labios increiblemente grandes y antojables unos labios vainales grandes y por poner la cereza en el pastel Astrid lubricaba a mares, y muy pegajoso. de un color blanco, dulce de hecho. un manjar es esa niña en pocas palabras. sin mas de admirar el paisaje hise la tanga de su hermana a un lado y comenze con mi distra lengua a jugar y buscar el ...