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una mujer primeriza
Fecha: 17/04/2021, Categorías: Zoofilia Autor: villavosex68, Fuente: SexoSinTabues
Una mujer a quien no le gustan los perros, tiene que cuidar durante un tiempo un dálmata de su hermana. Pasados unos días y encontrándose su esposo fuera, se sorprenderá al que querer calmar su libido con el dálmata. aunque esa no será la única sorpresa que recibirá junto con el intenso placer de esta relación. Fue increíble lo que hice hace apenas unos días después que mi hermana dejara a su perro bajo mi cuidado ya que tuvo que salir de viaje y no tenía quien se lo cuidara a lo que yo accedí con un poco de recelo ya que no me atraen mucho los perros, el caso es que Terry como se llama el animalito es un dálmata no son muy grandes y a decir verdad no daba mucho trabajo. Todo sucedió un fin de semana cuando mi esposo se ausento durante el día por motivos de trabajo y cuando llegaba de noche lo hacía exhausto y se dormía rápidamente yo comprendía y no le recriminaba ya que es muy complaciente en cuanto al sexo y me satisface plenamente, solo que ese sábado estaba a millón no sé porque, y me hice unas pajas como hacía mucho tiempo no me las hacía, estaba en la sala de nuestra casa gozando de lo lindo de mi almeja recién rasurada y con la ayuda de una zanahoria me daba gusto y placer en mi chocho y en mi ano el cual siempre tiene un lugar preferencial en los gustos de mi esposo estaba sumida en oleadas de placer. Realmente no me imaginaba que una zanahoria me haría tan feliz ya que podía controlar lo angosto y lo grueso de la hortaliza según como me plazca, de pronto note un ...
... cálido aliento lo que hizo que detuviera el maravilloso encuentro vegetariano, me asusté mucho pero me di cuenta que era Terry, me disguste mucho con él y trate de sacarlo hacia el patio cuando note que su entrepierna estaba algo crecidita y me reí de la situación, "vaya he calentado al pobre de Terry, estamos los dos iguales," pensé, entonces lo deje que me acompañara, una extraña sensación se apodero de mí, pero me dije a mi misma que si estaba loca. Proseguí lo que Terry había interrumpido pero esta vez con él a mi lado me encontraba otra vez taladrando mi almejita con la zanahoria cuando la deje a un lado para cambiar de posición y Terry, inmediatamente comenzó a lamer desesperadamente la hortaliza me deje llevar por la pasión y la lujuria y acerque la zanahoria a mi culo y la pase de un lado a otro sabiendo que el perrito se la había lamido eso produjo un espasmo increíble dentro de mí y me corrí con fuerza brutal pero no todo quedo allí porque tenía ganas de mucho mas y me atreví por a hacer lo que muchas veces había leído en relatos de zoofilia y de los cuales no estaba nada de acuerdo ese día cambiaria mi opinión. Terry al seguir lamiendo la hortaliza que estaba muy cerca de mi culo ya algo dilatado se percató de eso y cambio la zanahoria a por mí culito, sentí desfallecer cuando la lengua áspera del animal rozaba mi almeja y mi culo al mismo tiempo nada que ver con una lengua humana eso era insoportable demasiado placer Me asuste cuando intento montarme pero dada la ...