1. Masajistas cogen mi novia en su cumple con mi consentimiento


    Fecha: 27/05/2021, Categorías: Intercambios Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Era el cumpleaños de Nadia, mi novia morenita, con un trasero rico y redondo que invita a pecar. Siempre le he pedido un trio…. cuando estamos cogiendo siempre le pregunto si se dejaria cojer por alguien más, al principio dice que no, pero entre mas caliente , mas lo empieza a aceptar, mientras más lo acepta, más caliente se pone y se nota en la forma de jadear. Pero ya en frío hace que ha olvidado todo aunque haya prometido muchas cosas, se que en el fondo le gustaría sentir una verga ademas de la mia, y a mi me encantaria verla montada en una verga… cabalgando, viendo su cara de placer y su rico culo moverse arriba de alguien. Yo tenia mi estrategia para convencerla. De cumpleaños le regalaría un masaje, para que ella no sospechara, el masaje sería para los dos, en una misma habitación estaríamos los dos, a ella le daría un masaje una chica y a mi el chico… Rentamos una habitación de hotel, era más privado y más acorde a mis propósitos. Cuando vio que era una pareja que nos daría masaje, al principio sintió nervios y miedo, pero le menti diciendole que cada quien tendría un masaje de su correspondiente igual. Nos quitamos la ropa en el baño, al verla en su tanguita gris que me encantaba se me paro la verga inmediatamente, la abrace por detrás y le bese el cuello apasionadamente. Ella solo se dejo besar, mientras empezaba a darle masaje a sus pechos, cosa que le encanta… y se dejó acariciar, supongo que también estaba excitada y en el fondo sospechaba que algo iba a pasar. ...
    ... Salimos del baño en ropa interior, ella envuelta en una toalla por pudor. Nos acostamos en la mesa de masaje boca abajo, y su masajista empezó a darle masaje con aceite. Le empezaron a masajear las piernas, lentamente … después los pies y los brazos. Se empezó a relajar y poco a poco se adormilo un poco…. ya estaba entrando en confianza. Después de un rato empezó a darle un masaje en la espalda y en la parte baja de la espalda, acariciando los lados de sus pechos, provocando que despertara por la sensación que inevitablemente sentía. Le abrió ligeramente las piernas para masajear sus muslos internos, rozando su vulva suavemente. Y aunque ella apretó las piernas, a fuerza de insistencia la masajista logró que ella abriera las piernas. Después de un rato empecé a notar como su respiración se aceleraba y sus piernas se movían, signo de que se empezaba a excitar aun con el masaje de una mujer. Le hice una seña al masajista para que intercambiara lugar, sabía que era el momento adecuado. El masajista tomó el lugar de su compañera y ella siguió con el masaje conmigo. Nadia vio el cambio pero no supo qué decir, y antes de que ella protestará el masajista siguió en masaje. Con sus manos más fuertes y grandes la empezó a tocar, un masaje que tenía un poco de caricias, al principio ella se quiso levantar, pero sus manos y masajes la obligaron a permanecer acostada, y las sensaciones que seguramente sentía la terminaron por convencer. En ese momento cerró los ojos y empezó a disfrutar el ...
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