1. Diana y Alfredo.Amigos de verdad


    Fecha: 31/05/2021, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... verga, de arriba abajo.
    
    —No importa mi amorrr……quiero que seas muy cachonda!!!!......me gusta que se exciten mucho contigo!!!!! —me decía muy excitado.
    
    Yo sabía que las fantasías eróticas, engrandecían a mi esposo y sentía que se le paraba más la verga con cada comentario que hacía, así que decidí prolongar su excitación.
    
    — ¿Te gusta que use ropa muy provocativa verdad?....aunque sabes que los hombres se excitarán conmigo cuando me vean esos micro vestidos que me pongo para salir? —Dije, cuando ya totalmente agachada, acerqué mi boca a su pene y empecé a pasar de arriba abajo mi lengua, humedeciendo todo su tronco con mi saliva.
    
    —Siiii, me fascina mi amor, mássssssssss…me vuelve loco imaginarte como una puta ante los hombres…..— gemía, cada vez más excitado.
    
    Le pasé mi lengua por el glande, rodeándolo con la punta de mi lengua. Percibía su temblor y las venas marcadas y voluminosas a lo largo del falo. Recorrí dándole chupaditas y besitos, a todo lo largo de su verga erecta, disfrutando cada espasmo de placer. Luego, me introduje la cabeza de su tremenda verga, mamándosela con deleite y enrollándole el glande con mi lengua y de vez en vez, darle chuponcitos a la cabecita, situación que volvía loco a mi esposo y más cuando, dejaba su pene dentro de mi boca sin moverme, simplemente dejando esa verga rodeada con mis labios.
    
    Mi esposo no resistió más y, rugiendo, me empujó mi cabeza, metiéndome la verga hasta dentro. Yo sentía que su rico glande resbalaba entre ...
    ... mi lengua y mi paladar, hasta mi garganta y luego salía hasta mis labios para, de nuevo, volver a entrar, bañando todo mi interior de su masculinidad. Mis labios femeninos y delicados, rodeaban el tronco de su verga, resbalando por la carne cada vez que entraba y salía. Mis delicados dedos rodeaban la base de su verga, permitiendo que el resto de mi finísima mano acariciara sus huevos, haciendo que disfrutara plenamente la mamada; así como he aprendido que fascina tanto a los hombres……y que tantos hombres desearían que se los mamara de esa forma.
    
    —Aghummmmmmm, mmmmmmmm, que rico mi cielo —dijo en lo que sus ojos no dejaban de ver como su verga entraba y salía de mi sensual boca y yo ahí hincada ante él, en la puerta de nuestra casa.
    
    Seguí excitándolo más y más. El me acariciaba el pelo y me lo echaba hacia atrás para quitarlo de mi cara y poder ver como se la mamaba.
    
    —Te amooooo, dime mássssssssssssss, quiero escucharte mássssss —me dijo suplicante.
    
    — ¿Qué quieres que te diga mi amor……que te quiero y amo? - Le dije sarcásticamente porque yo sabía lo que él quería escuchar.
    
    —Nooo mi amor,…..quiero que hagas volar mi imaginación como sabes hacerlo.
    
    — ¿Ahhhhhh…..quieres saber si me porto bien putita cuando tu no estás?
    
    — ¿Quieres saber si cuando te vas de viaje, me pongo ropa muy atrevida, con escotes y esas minifaldas de locura que me compras?¿Quieres saber si así salgo a la calle a provocar a los hombres, como si estuviera buscando un macho que me invite a ...
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