1. Me hacen tragar vergas y más vergas (2)


    Fecha: 01/06/2021, Categorías: Gays Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    Las ocho manos me sobaban por todos lados y cuatro bocas y lenguas me hacían su presa con besos, lamidas y mordiscos en medio de un concierto de jadeos, gemidos y palabras agresivamente obscenas.
    
    Yo ardía de ganas y suplicaba: -cójanme… por favor, cójanme… quiero verga… -Pero ellos parecían enredados en su calentura incontrolable.
    
    Era un aquelarre desenfrenado hasta que por fin, mi tío y el señor Manuel pudieron imponerse y obligaron a los visitantes a apartarse de mí.
    
    -Basta, amigos, ¡parecen animales en celo! - intervino tío Eli. -¿Quieren darle verga o no?
    
    -¡Claro que sí! –contestó el señor Anselmo, con la pija bien erecta como los otros tres.
    
    -Bueno, entonces calma, señores. –dijo tío Eli y sorpresivamente le preguntó al señor Manuel: -¿Tenés naipes?
    
    -¿Qué?... ¿Vamos a jugar a las cartas? –preguntó el señor Manuel con expresión de sorpresa.
    
    -No, claro que no, pero con las cartas vamos a ver el orden en que estos amigos se lo cogen al nene.
    
    -Ah, entiendo, ya traigo los naipes. –dijo el señor Manuel y abandonó el dormitorio. Entonces tío Eli explicó: -Ahora ustedes van a ir tomando un naipe del mazo y según el naipe será será el turno. Y vos –me dijo. –Sacá la vaselina de la mesita de luz y estate listo para lubricar cada verga antes de que te la metan en el culo, porque vamos a empezar por el culo.
    
    -Sí, tío, lo que vos digas… -contesté sintiéndome cada vez más a gusto como sumiso y que fuera mi propio tío el que me dominara. ¡Cuánto morbo!
    
    Lo ...
    ... cierto fue que los naipes indicaron que primero me iba a coger el señor Gerardo y después el señor Anselmo, el señor Guillermo y por último el señor Romualdo.
    
    Apliqué vaselina en la verga del señor Gerardo con manos que temblaban de nervios y ansiedad. ¡Qué hermosa verga! Bien dura y un poco curvada hacia arriba.
    
    -Muy bien, Jorgito. En cuatro patas… -me ordenó mi tío y por supuesto obedecí enseguida, jadeando de excitación.
    
    Ya en posición y con el señor Gerardo detrás de mí, listo para cogerme, me di cuenta de que el modo había cambiado. Ya no iba a tragar verga por el culo mientras se la chupaba a otro señor, pero no tuve mucho tiempo para pensar, porque de inmediato empezó a entrarme la verga de mi primer violador.
    
    El dolor intenso me hizo gemir y corcovear, pero como siempre ese sufrimiento terminó cuando la verga estuvo toda adentro y empezó a ir y venir produciéndome un goce indescriptible de tan intenso.
    
    A la izquierda de la cama el resto miraba y de pronto el señor Gerardo se corrió en medio de rugidos como de un animal y me soltó varios chorros de semen caliente en mi culo sediento de esa leche deliciosa.
    
    Enseguida trepó a la cama el señor Anselmo y me apliqué a envaselinarle su verga. ¡Ay, cómo me hubiera gustado mamarla!, pero soy un chico disciplinado y reprimiendo mis ganas completé la tarea para después volver a ponerme en cuatro patas con cierto temor, porque esa verga era bastante grande, larga y gorda.
    
    -¡Qué bien armado estás, Anselmo! –lo ...
«12»