Uso práctico
Fecha: 06/06/2021,
Categorías:
Fetichismo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Luciana se sentía hinchada.
Era como si su interior se hubiera solidificado. Se sentó en el inodoro en el baño de su dormitorio, mirando hacia abajo sus pechos. Sus pezones estaban duros, apretados contra su remera. Es la tercera vez que trató de defecar. No había podido desde el lunes, hace dos días.
Pero ,aunque se sentía enferma con el estreñimiento, el aire fresco contra su agujero abierto se sentía bien.
Con un suspiro ella se levantó, subió su falda y truza, y se dirigió frente al espejo, arreglandose el cabello y calmándose antes de ver a Paty, su amiga residente. Si Paty no percibía que realmente estaba necesitada, no la ayudaría.
Luciana hizo una mueca en el espejo, imitando la voz de Paty, "sólo para usos prácticos, Luciana"Salió del baño y caminó por el pasillo, pasó su cuarto hasta el Nº 10, el cuarto de Paty.
Tocó la puerta, esperando que Paty no la tome por frívola otra vez. La puerta se abrió y Paty le dió la típica mirada "¿que querrá esta vez?."
Paty era una hermosa muchacha de piel canela, de 23 años, más alta que Luciana. Luciana tenía más busto pero Paty era reconocida por sus piernas, muslos firmes y sexy trasero redondo. "¿Qué quieres?" preguntó Paty.
"Tienes que ayudarme, Paty", dijo Luciana desafiante. "Sigo estreñida." Paty la miró bien y tocó la mejilla de Luciana. "Te ves pálida. Bien, entra" Paty abrió la puerta y Luciana entró al dormitorio. Era del mismo tamaño que el suyo, pero estaba pulcramente ordenado. Sólo lo ...
... necesario estaba a la vista. Paty se volvió hacia su escritorio. La silla estaba metida bajo éste.
Luciana se vió, como siempre, algo humillada por el enorme y perfecto trasero de Paty. Este hacía que la pequeña falda sobre él se viera más corta y con más vuelo alzada con la firme cola.
Paty agarró el asa del cajón superior derecho de su escritorio. y puso rostro serio. "Sabes, Luciana. No te estoy dando un juguete." "Yo sé, yo sé, Sólo para usos --" "prácticos", Paty terminó. Asintió y abrió elcajón. Inmediatamente Luciana pudo oír gritos minúsculos. Luciana sintió su corazón acelerado. Ella observó con avidez en el cajón.
Decenas de pequeños hombres de 1 pulgada de estatura yacían desnudos agitando sus manos clamando piedad a las titánicas mujeres que los miraban desde arriba. Todos eran jovenes, algunos se veían incluso como menores de edad y mucho más asustados que el resto.
Paty los separó en grupos de dos.Luciana se comenzó a sentir extrañamente húmeda. Cogió uno, pero Paty le palmeó la mano. "¿No puedo elegir uno?" Le suplicó. "¿Para qué lo necesitas?" Luciana se calló.
Paty cuidadosamente retiró uno, y Luciana aguardó por la elección al azar.El chico escogido parecía ser moreno, pero Luciana no podía reconocer ninguna de sus diminutas características. Él se retorció entre los dedos pulgar e índice de Paty hasta que está lo soltó en las nerviosas palmas de Luciana. El pequeño hombre cayó de espaldas, con una mirada de horror. Luciana sonrió.
"Es tarde", dijo ...